El camino entero
fue bastante tenso. Roy iba en el asiento trasero maldiciendo todo a su
alrededor y Dinah, por su parte, no hacía más que ignorarlo para permanecer en
calma, agradeciendo profundamente cuando Oliver al fin se estacionó fuera de su
casa.
-Roy. Por favor, no
me hagas tener que ayudarte- dijo Oliver, saliendo del carro y esperando.
Pero,
sorpresivamente, Roy se bajó del auto y entró como si fuera su casa.
-Ya estoy aquí,
¿Qué quieren?-
Oliver tenía la
esperanza de que eso no terminara en un desastre total ya que el chico había
entrado sin tener una rabieta.
-Bueno...- miró a
Dinah.
-Primero que nada
necesitamos saber desde hace cuánto que estás consumiendo- no iba a utilizar
palabras como esto o eso, había que llamar las cosas cómo eran.
-Obviamente no mucho, Dinah- rodó los ojos exasperado.
-No, obviamente nada, con estas cosas no puedo andar adivinando porque de eso depende si tú vives o mueres-
-Obviamente no mucho, Dinah- rodó los ojos exasperado.
-No, obviamente nada, con estas cosas no puedo andar adivinando porque de eso depende si tú vives o mueres-
Los ojos azules de
Oliver se abrieron al escuchar eso, ¿realmente tenía que decirlo así?
-¡Dinah! ¡Él no se
va a morir!-
-Pues si las cosas
no cambian, puede que sí-
-... ¿Cuánto
tiempo, Roy?- realmente ya no iba a poder ignorar eso.
-Algunos meses...
Como... ¿Once? No, no sé... No me acuerdo-
¿Casi un año, tal
vez más? Oliver no podía creer que no lo hubiera sabido.
-¡¿No recuerdas?!
¡¿Cómo es posible no recordarlo?! -
-Digo, no lo apunté
en mi diario- repuso sarcástico.
-Roy, esto no es
cualquier cosa. Ahora sí, ¿Qué drogas has consumido?-
Oliver tuvo que
cerrar los ojos después de la pregunta de Dinah. Él no quería saber.
-Ya sabemos que
mariguana y algún inyectable, ¿Qué más?- insistió ella.
-Nada más. Sólo me
inyecté una vez y había tomado mucho-
-Ah, ¿Entonces si
ahorita mismo vamos y revisamos la casa sólo voy a encontrar marihuana?-
-Me da igual lo que
vayas a encontrar, a mí no me van a encerrar, y si lo hacen, me salgo y no
vuelves a saber de mí-
-¡No nos amenaces, Roy!-
Oliver se puso de pie- ¡No se trata de deshacerse de ti, se trata de ayudarte!
-
-Pues yo ya te
dije-
-A ver, Roy, nadie
tiene que internarte si sabemos cómo ayudarte-
-Sólo dinos Roy, sé
honesto- Oliver ya estaba imaginando lo peor.
Roy rodó los ojos y
gruñó frustrado.
-Hierba,
obviamente, coca... heroína-
-... Joder- ¿cocaína,
heroína? Básicamente lo más difícil de dejar. Miró a Dinah, otra vez para
compartir en la miseria.
La mujer se pasó la
mano por el rostro.
-Vamos a tener que
ver a un doctor... Y te voy a buscar una psicóloga-
-¿Psicóloga? Claro
que no, no estoy loco-
-Gracias, Dinah,
¿crees que puedas conseguirnos una cita con la psicóloga para mañana?- Tendría
que tomarse el día libre, pero no importaba en este momento.
-Claro... Y Roy, lo
que sea que pase desde ahora va a depender muchísimo de lo que opine tu papá,
él es el que desde este momento va a tener que estarte vigilando 24/7 como si
fuera tu sombra-
-¡¿Qué?! ¡No mames,
Dinah, él sólo me va a aventar a una clínica!-
Oliver hizo una
cara de incredulidad ante eso.
-Um, bueno... en
realidad una clínica podría ayudarte mejor que yo, ¿no crees?- la idea de estar
al pendiente de Roy 24/7 era aterradora.
Pero antes de que
pudiera siquiera preverlo, un libro de esos que Dinah tenía en la sala voló directo a su cabeza.
-¡Vete al infierno,
Queen!- Roy debió haber sabido que todo ese de "Cambiar y estar ahí para
él" no era más que un circo- Espero que tu maldito dinero te acompañe
cuando estés viejo y solo, porque yo ya no-
La cara de Oliver
se puso completamente roja.
-¡¿Qué demonios,
Roy?! ¡Sólo estoy tratando de ayudarte, ¿y me atacas?!- le desconcertó totalmente
ver a su hijo reaccionar de esa manera.
-¡Quieres ayudarte
tú! Para el cine sí estás bien puesto, pero nada más es algo de esforzarse y
contigo para nada- gruñó indignadísimo.
-¡Tus drogas te han
vuelto paranoico! Sí necesitas un psicólogo porque estoy aquí, Roy. ¡Estoy aquí
y me estás gritando y aventando libros!- Oliver estaba igual de indignado.
-Loco tú si crees
que me vas a meter a una clínica-
-Eso ni siquiera es
lo que dije- se fue a sentar al lado de Roy- Aunque podemos estar de acuerdo en
que no hay vergüenza en obtener ayuda, ¿Por qué te molesta tanto?-
-Pues eso es lo que
quieres, y si no te gusta la idea de tomar "responsabilidad por tus
acciones", pues no me vigiles y ya- Roy lo conocía perfectamente, seguro
le parecía un fastidio tener que estar al pendiente.
-¡Eres tan
dramático! Veamos lo que dice la psicóloga mañana-
-No voy a ir a
ningún lado contigo, ya no eres mi papá- eso de la clínica había sido el colmo.
- No digas
estupideces. Vas a ir-
-Estupidéz que te
hayan dejado adoptar-
Oliver trató de
mantener la calma para no decir algo de lo que se arrepentiría.
-Ya te lo dije
antes, mi paciencia no es eterna. Deja de ser grosero. Dale gracias a Dinah por
venir con nosotros, ya nos vamos.-
-Pues mi paciencia
tampoco, y yo no voy contigo-
Oliver tuvo que
cerrar los ojos para intentar obtener perspectiva.
-Dile adiós a Dinah
y sube al auto-
-A ver, cálmense
los dos- Dinah no podía creer que Roy hubiera aventado un libro- Roy,
tranquilo-
-Tranquilo nada, yo
no voy a ir a ninguna clínica. Y ojalá cuando Oliver esté viejo y enfermo,
alguien se haga cargo, porque por mí que se pudra en un asilo-
- No te preocupes
por mí- miró a Dinah, agradecido por su intervención- Tú me cuidarás, ¿no,
Prettybird? -
Roy le mostró el
dedo medio antes de que Dinah pudiera pensar en qué contestar.
Y eso fue lo que
finalmente hizo que Oliver perdiera los estribos y le diera una bofetada.
-¡Oliver, ¿Qué te
pasa?!- Dinah le reclamó, no era el momento para hacer las cosas peor.
- Se lo merecía, y
lo sabes- gruñó Oliver.
-Vete a la mierda,
Queen-
-Roy, ya basta-
-Pues que no joda,
me quiere mandar a una clínica porque le da hueva vigilarme. Prefiere pagar
para que se arregle el problema-
-¡Eso no es cierto,
Roy! Obviamente voy a cuidar de ti, realmente no sé por qué exageras tanto, y
deja de llamarme "Queen"-
-Pues porque te
conozco. Y no estoy exagerando… Siempre haces lo mismo. Te odio- Roy trataba de
no decir ese tipo de cosas para no parecer un puberto egocéntrico, pero estaba
enserio muy frustrado y pocas veces había sonado tan sincero.
-Por favor, no
digas eso...- fue todo lo que Oliver pudo decir, estaba completamente
desanimado por lo genuino que sonaba.
-Es la verdad, ya
me hartaste-Roy no planeaba regresarse con él a ningún lado.
-Está bien. Bueno,
es quedarte conmigo o en la clínica de rehabilitación. Tú decides-
-Ninguno-
-Decide o decidiré
por ti. Tienes dos opciones-
-Pues decide tú, me
vale-
-Supongo que vas a
ir a una clínica entonces - Oliver realmente no iba a hacer eso, pero estaba
molesto y herido por el "Te odio"
-Entonces supongo
que no me voy contigo- ya, se rendía. Tampoco se iba a pasar toda la vida
ruegue y ruegue para que Oliver lo quisiera.
- Esa no era una de
tus opciones, vamonos -
Y sorpresivamente,
Roy no se quejó y más bien echó a andar cuando Oliver abrió la puerta, pero
echó a correr lo más rápido que pudo cuando éste volteó para despedirse de
Dinah. Sin detenerse a pensarlo o siquiera a mirar atrás, Roy se fue por el
camino más complicado posible, por el que estaba seguro era más difícil para
Oliver, claro sólo en caso de que el tipo llegase a seguirlo.
-¡Roy, qué carajo!-
Oliver gritó al darse cuenta de lo que hacía el chico, y por supuesto, comenzó
a correr para alcanzar a su hijo.- ¡Regresa aquí, ahora mismo, maldita
sea!-
Pero al escucharlo,
Roy sólo apresuró el paso y se fue por lugares en los que había que brincar
rejas e incluso entrar por lugares pequeños.
Oliver finalmente
tuvo que volver a la casa de Dinah y decirle que no había podido localizar al
chico.
-Dinah, no sé qué
hacer, ¿cuál es su problema? - exclamó, comenzando a llamar a la policía.
-¿Suyo? ¿De él?-
-¿Qué demonios
estás insinuando?-
-¿Cómo se te ocurre
mencionar así la posibilidad de la clínica?-
-Espera un segundo-
dijo, mientras alguien respondía a su llamada y le explicaba a la policía que
su hijo había huido. Genial, los servicios de protección infantil iban a amar
esto, pensó y luego se dirigió a su (ex) novia- Él es el que lo mencionó en
primer lugar. Ni siquiera había pasado por mi mente... y no sé por qué odia
tanto la idea si no quiere que YO lo cuide...-
-Oliver, obviamente
sí quiere. Y además lo dijiste inmediatamente después de que te dije que lo
vigilaras, obvio lo iba a relacionar con que no querías hacer eso-
-Bueno, no es como
si estuviera saltando de alegría ante la idea de asegurarme de que no esté
consumiendo drogas, pero por supuesto que lo voy a vigilar y cuidar. Ugh,
bueno, voy a tomar el auto para seguir buscándolo... ¿vienes?-
-Eso le dijiste,
que no. Lo voy a esperar por si vuelve o por si llega la policía-
Oh, duh, de repente
recordó lo que le había dicho a Roy en realidad.
-Lo arreglaré, lo
prometo. Por favor llámame si aparece aquí o si la policía lo encuentra- le dio
un beso en la mejilla antes de agarrar sus llaves.
Ayyy, estos dos me producen tanta pena �� como es posible �� Roy tan malcriado y oliver tan bruto con sus respuestas ��♀️
ResponderBorrarMe encantan estos dos!!
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