Roy, por su parte,
se encontraba vagando ya un poco más retirado de casa de Dinah, cerca del
centro de la ciudad. Oliver casi no lo llevaba ni recogía de ningún lado, así
que se sabía perfectamente las rutas de los camiones en la ciudad.
Oliver seguía intentando llamar a Roy, sin suerte. Terminó llamando a Bruce, Hal y Barry, para que pudieran vigilar a sus hijos en caso de que Roy intentara contactarlos. Cuanto más tiempo pasaba, más se convertía en el peor día de su vida. La ansiedad, la preocupación, la culpa y el miedo empezaban a hacer que le fuera imposible funcionar como una persona normal. Tuvo que detener el auto y llamar a Roy nuevamente, cuando el niño no respondió, dejó un mensaje. “Roy, por favor contesta el teléfono, ¿dónde estás? Necesito saber que estás bien, me estoy imaginando lo peor... Lo siento. Prometo no enviarte a ninguna parte”. Oliver creía en resolver sus propios problemas, pero en ese momento no le importaba a quién tenía que pedir ayuda… tendría que llamar a Clark….
-Ollie, ¿Qué tal? ¿Cómo
estás?-
-Mal, estoy mal. Se
escapó Roy. No tengo idea de dónde está, llamé a la policía, pero no lo hemos
encontrado, se está haciendo tan tarde... Necesito tu ayuda. ¿Dónde estás?-
-...Voy para allá-
Roy, por su parte,
había llegado al fin a lo más parecido que tenía a un refugio, era más bien una
casa abandonada que Jason y él habían habilitado con algo de seguridad para que
no pudiera entrar nadie más, pero que aún no tenía más que un viejo sofá y
algunas botellas de agua... No era lo mejor, pero era preferible a la calle o
que seguir "viviendo con Oliver" para estarse sintiendo mal a cada
rato.
Al fin a salvo,
revisó su teléfono y pudo escuchar sus mensajes, pero sólo rodó los ojos con el
de Oliver. A fin de cuentas no importaba si se quedaba con él en lugar de
enviarlo a una clínica, porque sería algo que Oliver no quería hacer, y Roy
tampoco quería que el hombre estuviera cuidándolo a fuerzas... Si Ollie en
verdad no quería echarse la responsabilidad, pues no lo iba a obligar.
-Gracias a Dios
estás aquí- Oliver rápidamente atacó a Clark con preguntas cuando llego el
hombre- ¿Dónde está Roy? ¿Lo ves? ¿Está bien? ¿Está en peligro?-
-Lo vi, está bien,
sólo que me pareció muy intrusivo entrar para hablar con él-
Oliver finalmente
pudo respirar de nuevo al escuchar que su hijo estaba bien.
-Gracias, sólo dime
dónde está, lo recogeré-
Clark le pasó las
coordenadas sin problema, aunque algo extrañado por la preocupación del tipo.
-¿Pasa algo con Roy?-
-No... bueno, sí.
Él... Oliver no quiso contarle a "el papá de América" sobre sus
problemas. Realmente no necesitaba que otra persona lo juzgara-...Estamos
teniendo dificultades, pero estará bien, gracias por encontrarlo-
-No hay problema...
De todos modos avísame si puedo apoyarlos en algo-
Oliver hizo una
mueca al encontrar la casa abandonada. Podría haber pateado la puerta para
abrirla, claro, pero en cambio, sintiéndose como un idiota, tocó la puerta.
Y por supuesto, Roy
no abrió. Tomó un arma que Jason había dejado ahí en caso de que fuera alguna
visita no deseada, pero eso fue todo. Estaba demasiado cansado como para hacer
algo más.
Después de unos
segundos, Oliver no tuvo más remedio que patear la puerta para abrirla, y luego
mirar al muchacho sorprendido. El hombre permaneció incómodo durante unos
segundos, mirando al niño que, más que enojado, parecía cansado y asustado. Una
parte de Oliver quería gritarle. La otra parte quería hacer una broma sobre lo
ridículo de la situación, pero antes de que pudiera decidir qué decir, corrió
hacia el niño para abrazarlo con firmeza. No podía decir mucho porque tenía un
nudo en la garganta.
Roy estaba tan
sorprendido y descolocado que dejó caer el arma en el sofá. Para empezar, no se
esperaba a Oliver ahí, y además estaba de lo más tenso por lo que fuera a
pasar.
Oliver lo abrazó
por un segundo más.
-Estás bien... estás
bien...- dijo, casi como si estuviera tratando de convencerse a sí mismo. Cuando
soltó al niño, trató de mantener el control, pero era algo difícil- ¿Qué
carajo, Roy? ¿Cómo pudiste hacerme eso? ¡¿Qué fue eso?! ¿Qué es esto?-
Preguntó, señalando alrededor de la casa y terminando con apuntar al arma en el
sofá.
De vuelta al típico
Oliver.
-¿Hacerte algo yo?-
lo miró estupefacto.
-¡Sí, estúpido,
mocoso egoísta! ¿Cómo pudiste hacerme eso a MÍ? ¿Cómo pudiste huir y dejarme
para preocuparme por ti? ¡Este ha sido el peor día de mi vida! ¡Sentí que nunca
volvería a verte! ¿Realmente pensaste que no me preocuparía o no me importaría?-
Oliver tuvo que detenerse porque sabía que no tenía control sobre sus
emociones.
-Pues mejor para
ti, ¿No? Te quitas de problemas sin mover ni un dedo, está ideal- él no era el
egoísta ahí- Sirve que tampoco gastas ni en clínicas ni en enfermeras-
-Roy. No quiero
'deshacerme' de ti, lo siento si te hice sentir eso-
-Tú dijiste...-
Oliver gimió.
Oliver gimió.
-¡Mi vida, lo
siento mucho! Sé lo que dije, lo hice porque estaba enojado, en realidad nunca
tuve la intención de enviarte a ninguna parte. Por favor entiende que te amo y
que eres mi hijo y quiero apoyarte, y lamento no haber visto las cosas
claramente en el pasado-
-Pero tampoco
querías que me quedara en la casa para "vigilarme" ni te quisiste
quedar cuando me sentí mal... Y pues tampoco quiero que estés restregándome que
estás conmigo a fuerzas, mejor no-
-Roy, por supuesto que te quiero en casa, quiero cuidarte, y... tal vez eso me pone nervioso, porque sé que no he estado súper involucrado últimamente, pero no lo reprocho . Eres mi responsabilidad porque eres mi hijo. Elegí eso... ¿De acuerdo? ¿Puedes perdonarme?-
-Roy, por supuesto que te quiero en casa, quiero cuidarte, y... tal vez eso me pone nervioso, porque sé que no he estado súper involucrado últimamente, pero no lo reprocho . Eres mi responsabilidad porque eres mi hijo. Elegí eso... ¿De acuerdo? ¿Puedes perdonarme?-
-No sé- Oliver
tenía esa habilidad de decir cosas que sonaban muy bien y
"olvidarlas" en unas horas solamente.
Oliver acarició el
cabello del niño, su única forma consistente de mostrar afecto. Sabía que no
podía obligar al chico a creerle después de una conversación de 2 minutos.
Sabía que en realidad tenía que esforzarse.
-Está bien, bueno, hablemos de la huida. Roy, esto nunca puede volver a pasar.-
-Está bien, bueno, hablemos de la huida. Roy, esto nunca puede volver a pasar.-
-Ajá- no estaba muy
interesado ni se sentía mal al respecto.
-...¿Disculpa?-.
Oliver había estado planeando castigar al chico sin importar qué, pero
honestamente... había esperado que el chico se sintiera mal, incluso que Roy se
disculparía. La actitud de indiferencia era completamente inesperada.
-Sí, ya no va a
pasar- rodó los ojos sin mucho interés en el tema.
-Oye, entiendes que
esto no fue cosa pequeña, ¿verdad? Llamé a Clark. Llamé a la policía. Dinah y
yo nos estábamos volviendo locos. ¿Entiendes eso?-
-Entiendo que lo
volvería a hacer si vuelves a decir que me vas a internar-
Oliver frunció el ceño.
-¿Quieres que te
castigue aquí o quieres ir a la casa de Dinah para que puedas disculparte con
ella primero?-
-No tengo de qué
disculparme, discúlpate tú-
-Ven aquí, ahora
mismo- Oliver extendió su mano.
-¿Para?-
Oliver comenzó a
quitarse el cinturón.
-Roy. Ven aquí -
-¡¿Qué?! ¡No!- se
alejó.
-¿No? ¿No crees que
te lo mereces después de huir de casa, lo que hizo que tu familia y amigos se
preocuparan y ahora me AMENAZAS de que volverás a hacerlo? Ven aquí ahora y
quizás no tengas que bajarte los pantalones-
-No, porque no fue
mi culpa tener que irme- se hizo más para atrás.
-Nadie te obligó a
irte, quiero que entiendas que no importa lo que esté pasando, no te vas solo
de esa manera! Tienes unos 5 segundos para venir... no me hagas contar-
-Fue tu culpa...-
Oliver puso los ojos en blanco, ¿realmente tenía que contar?
Oliver puso los ojos en blanco, ¿realmente tenía que contar?
-Una... Dos...-
-¡Ya deja de
contar!-
-¡Tres!-
Cuando lo vio
venir, Roy rodeó el sofá para esquivar a Oliver y salir por la puerta.
Desafortunadamente
para Roy, Oliver fue más rápido y lo agarró del brazo con dureza.
-¿Enserio?-
preguntó, mientras comenzaba a golpear el trasero del chico con el cinturón.
-¡Auuu! ¡No me
pegues!- Roy comenzó a jalarse furioso, pero también algo desesperado. Se
sentía muy cansado y además le dolían el pecho y la espalda, no tenía ni
fuerzas para forcejear mucho.
-¡No quiero
pegarte, Roy, pero lo haré cada vez que hagas algo estúpido como huir de casa!-
pausó- Vas a disculparte con Dinah. Vas a escribir una nota de agradecimiento a
Clark por encontrarte. ¿Lo entiendes?-
Roy sorbió mocos y
jaló su brazo como pudo.
-No, yo no le pedí
nada- no pudo evitar soltar algo de tos seca.
-Vas a hacerlo
porque soy tu padre y te estoy pidiendo que lo hagas, Roy Harper- Golpeó al
chico sobre sus pantalones 3 veces más y luego se detuvo. Sabía que el niño
estaba enfermo y en realidad no quería empeorarlo.
-¡Yaaa!- sí le
dolía, ni que fuera de piedra- ¡Deja de pegarme!-
Oliver puso los
ojos en blanco, lo soltó y comenzó a ponerse el cinturón.
-Ya pues. Cállate-
Roy frunció el ceño
y lo miró muy molesto. ¿Cállate? ¿Enserio?
-Déjame en paz- se
pasó el brazo por el rostro para limpiarse los mocos y las lágrimas.
-No seas grosero.
Lo siento, pero sabes que te lo merecías. Vamos a disculparnos con Dinah y
luego podemos ir a comer. ¿Tienes hambre?-
-No me hables...-
-¿Quieres que me
vuelva a quitar el cinturón? ¡Deja de ser tan grosero!-
-¡Pues deja de
tratarme así!-
-¿Cómo te estoy
tratando? - Oliver pensó que había sido indulgente considerando todo.
-No te hagas
estúpido-
- Oh, te refieres a
indulgente. De acuerdo, la próxima vez seré mucho más duro contigo. Vámonos-
-Ya déjame...-
-¿Por qué estás
siendo tan hostil?-
-Hostil tú...
¿Cállate? Bravo, Oliver, los psicólogos estarían aplaudiéndote-
Oliver suspiró.
-En mi defensa,
estabas gritando demasiado fuerte, no te pegué tan fuerte. Lo siento. ¿Tienes
hambre sí o no?-
-No, vete a comer
tú- se sentó de nuevo en el sofá, aunque con más cuidado.
Oliver tuvo que
preguntarse de dónde sacó Roy la terquedad. No era de Oliver.
-Tienes 3 segundos
para comenzar a caminar hacia el auto, mi muchacho- Todo tenía que ser de la
manera más difícil con Roy. Tal vez el chico lo estaba probando para ver cuánto
tiempo se quedaría.
-Esta es mi casa,
me puedo quedar todo lo que quiera-
Oliver dejó pasar
los 3 segundos en silencio antes de acercarse y agarrar la oreja del chico. Lo
hizo ponerse de pie.
-¡No puedes
quedarte aquí, te enfermarás mas!- Estaba a punto de bromear que dejaría al
muchacho quedarse si hubiera una cama, pero Roy probablemente lo tomaría en
serio.
-¡Au! ¡Ya deja de
estarme jalando!- agarró el brazo de Oliver para intentar que jalara menos su
oreja- Eres un animal...- soltó, aunque él también era algo brusco.
-Pues camina solo,
mi vida- el nombre de cariño era más para el beneficio de Oliver. Le ayudaba a
recordar que el chico terco y enojado realmente era lo mejor que le había
pasado a Oliver.
-Pues suéltame-
Oliver aún lo tenía bien agarrado de la oreja.
Lo dejó ir, pero
honestamente se preparó para correr tras el niño por si acaso. Abrió la puerta
del pasajero tan rápido como pudo.
-Súbete-
Roy se subió al
auto y cerró de un portazo.
-Nos detendremos en
casa de Dinah para que puedas disculparte, estará muy feliz de verte- Oliver le
habido llamado tan pronto como Clark le dijo que Roy estaba a salvo, pero aun
así probablemente se había quedado un poco preocupada.
Roy lo ignoró lo
mejor que pudo de la manera en la que sabía que más molestaría a Oliver, volviendo
el recorrido mucho más tedioso de lo necesario, tanto que hasta se sintió algo
aliviado al llegar y salir del vehículo.
Jajaja al fin!! Estos dos me encantan <3
ResponderBorrarPor favor continua pronto!
Escriben maravilloso chicas, ya no puedo esperar a que continúen ♥️
ResponderBorrarRoy!!! Jaja es tan terco. Lo amo. Jaja
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