-¡Oye!
¡No seas grosero!- Porque si Oliver tenía que cambiar, el joven definitivamente
también lo haría- Sí, siempre te he dado demasiada libertad, y ya vimos lo que
hiciste con ella. Entonces, ahora tienes límites. Yo digo... bueno, entre
semana vas a llegar a casa a las 5 conmigo. Los fines de semana... no sé,
supongo que 9?- Oliver era tan malo en eso, y lo sabía. Él nunca había tenido
un toque de queda...
-8 y date de
santos-
Oliver se encogió
de hombros al chico.
-Ella es la jefa.
Estarás en casa a las 8-
-Y nosotros te
vamos a llevar y recoger de dónde quieras ir-
-Creo que tendré
que conseguir un sombrero de chofer- Oliver miró a Roy, esperando que al menos
el chico sonriera imaginándolo.
-No va a pasar todo
eso-
-Disculpa?-
-No me agrada la
idea, no va a pasar-
-Ya te dijimos cómo
van a ser las cosas, y creo que no es necesario decir que si no cumples, habrá
consecuencias. -
-Que miedo-
Oliver se rio. No culpaba
a su hijo por no saber cómo reaccionar. Los límites y las consecuencias
realmente no habían sido parte de su vida... al menos no en un par de años.
-No te estoy
amenazando, Roy. Sólo te digo cómo van a ser las cosas.-
-Ya veremos. Dinah,
hay que terminar de jugar-
Oliver los vio
jugar por un minuto, antes de levantarse.
-Roy, ¿estás seguro
de que no quieres volver a la casa? Quiero decir... ¿no quieres empacar tus
propias cosas?- Si él no quisiera hacerlo, Oliver podría simplemente llamar a
algunos agentes para empacar la casa. Oliver no quería hacerlo todo.
-No tengo casi nada
importante- un arco que le había dado Brave Bow y algunas otras cosas, pero
sólo eso.
-Bueno, entonces me
encargaré de eso- Oliver hizo una nota mental de las cosas que tenía que hacer.
Darle las gracias a Bruce por dejarlos quedar en su casa. Hablar con la
trabajador social. Empacar todas sus cosas. Fue a acariciar el cabello del
muchacho- ¿Quieres que me quede en la noche contigo?-
-Sí, ¿Te ibas a
ir?-
-Pensé que si
querías que Dinah se quedara, yo podría ir y hacer unas cosas... pero no
son importantes. Bueno, ¿cuando me toca jugar?-
-Ya mero- no tan ya
mero.
"Siéntate y
mira" no era realmente la cosa de Oliver, así que sacó su teléfono y
comenzó a revisar su correo electrónico.
-¿Sabes quién nos
va a extrañar? Bruce. Pobre tipo. Tendremos que agradecerle por dejarnos vivir
con ellos. Deberíamos darle un regalo...-
-Sí, Bruce me cae
bien- soltó Roy espontáneamente.
-Sí, al parecer te
caen bien todos...-
-¿Mande?- se había
distraído con sus cartas.
Oliver no pudo
evitar el pequeño ceño fruncido en su rostro.
-He dicho que es genial
que ames tanto a Bruce- Estaba celoso, no iba a negarlo.
-Es buen tipo-
siguió recargado en Oliver, totalmente ajeno al ceño fruncido del hombre.
-¿De verdad?... Es
confiable, pero un poco intenso.-
-Me ha invitado
muchas veces a comer y me ha aventado a la escuela varias veces-
-¡Yo te alimento!
Solo quiero decir que si yo fuera tú... preferiría tener un padre relajado y
genial... como yo- 'bromeó'
-Sí, digo, sólo ha
sido buen tipo. Me he quedado muchos días en su casa cuando se me acaba el
dinero y no me ha dicho nada-
Oliver puso los
ojos en blanco, pero tuvo que admitir que se sentía culpable. Era como si todos
tuvieran que ayudar porque él había sido un padre negligente.
-Bueno, eso ya no
va a pasar-
-¿Por?-
-Bueno, porque voy
a estar en casa más a menudo. Y no vas a estar en la casa de nadie como un niño
abandonado y hambriento...-
Tanto Roy como
Dinah voltearon a verlo como si no pudieran creer que se hubiera atrevido a
decir eso.
-...Eso soy-
-Roy...-
-¿Mande?-
-No eres un niño
abandonado, no pienses eso, quise decir...- Oliver no sabía cómo continuar. Obviamente
había querido decir lo que dijo y ahora estaba retractándose.
-No importa, digo,
no pasa nada-
-...Roy, lamento
haber dicho eso, ¿vale?- Al menos podría disculparse por ser insensible, incluso
si todos estuvieran acostumbrados a que él fuera así.
-Sí, no te apures-
al menos, a diferencia de su última vez en el hospital, Oliver estaba ahí por
voluntad propia.
Oliver besó su
mejilla.
-Está bien, me voy
a bañar. Dinah, ¿vas a pasar la noche o qué?-
-Sí, pero yo me
quedo en el sillón-
-Suena bien- El
hombre le besó también la mejilla. Cuando salió de la ducha, su hijo estaba
acostado en medio de la cama, sin dejar espacio para Oliver.
-Roy, ve a lavarte
los dientes y toma una ducha que apestas- Realmente, Oliver solo quería que Roy
se levantara para poder tener algo de espacio en la cama.
-Así me voy a
dormir, estoy cansado- traía los mismos pants, calcetines y la sudadera del día
anterior.
-No. Vamos, levántate.
Traje tu ropa-
-Esta está bien-
casi se estaba quedando dormido. Ni de chiste se iba a levantar a cambiarse
cuando apenas y podía tener los ojos abiertos.
-¿Roy? - Oliver
frunció el ceño, agarrando un brazo y levantando al chico- Sólo toma una ducha
rápida y ponte la ropa que traje-
-Déjame dormir- se
soltó y se volvió a tirar en la cama.
-Bien, entonces no voy a dormir aquí- dijo, casi para ver si Roy estaba realmente tan cansado, o simplemente siendo terco.
-Entonces no me voy
contigo a casa de Dinah- soltó, pero se cobijó en lugar de levantarse.
Ante la amenaza, le
dio un manotazo al niño (ignorando el hecho de que él lo había amenazado primero).
-¡Oye! ¡No me
amenaces, Roy!-
-¡Au!- eso lo
levantó un poco- No me amenaces tú-
-No grites,
despertarás a Dinah... ¿Podemos llegar a un acuerdo? Si te vas a bañar y te
cambias y te lavas los dientes... Te traeré una pizza de atún mañana- Lo que
sonaba repugnante para Oliver, pero había prestado atención a los pequeños
comentarios de Roy sobre que no le gustaba la pizza de pepperoni.
-Esque enserio ya
me quiero dormir...- pero también quería la pizza de atún.
-... Al menos ve a
lavarte los dientes-
Roy tomó el
estúpido cepillo de dientes y la pasta que daban en el hospital antes de levantarse
maldiciendo por lo bajo.
-Como fastidias-
masculló de malas antes de ir y lavarse los dientes. Lo bueno es que Oliver
jamás se acordaría de las nebulizaciones ni las medicinas, porque se estaba
muriendo de sueño.
Oliver tuvo que
sonreír cuando su hijo fue a lavarse los dientes.
-...Pero que
gruñón- Al menos, no tendría que preocuparse de caries encima de todo lo demás,
pensó el hombre, lo que le recordó que su hijo no había tomado su medicamento.
-Que fastidioso-
repuso el muchacho, tirándose de nuevo en la cama y tapándose como pudo.
-Oye, ¿estás
olvidando algo? - Oliver ya se había levantado y estaba organizando la medicina
de Roy para asegurarse de que no olvidara ninguna.
-Tú apagas la luz-
-Toma tu medicina-
El muchacho estiró
el brazo fastidiado y tomó la botella de agua en la mesita del cuarto para
pasarse las pastillas. Una vez que se las tomó, se volvió a acomodar.
-Y recuerda que el
doctor dijo que necesitabas tus nebulizaciones TODOS los días- Oliver fue lo
suficientemente bueno como para acercar la máquina.
-Mañana empiezo-
-Roy. Ahora. Vamos,
yo también estoy cansado, no seas difícil-
Roy tomó la máscara
de oxígeno de malas y prendió el aparato ese que lo hacía batallar para
respirar, pero igual se acostó mientras y a los cinco minutos de quince ya se
había quedado dormido.
Oliver se mantuvo
despierto hasta el final del tratamiento, para poder quitarle la máscara y
luego guardarla de manera segura. Estaba tan cansado, y después de todo, aun no
tenía mucho espacio en la cama. Se acostó torpemente y puso su brazo alrededor
de su hijo.
-...Te amo-
susurró, aunque Roy ya estaba dormido.
Y aun plenamente inconsciente,
Roy se acomodó como pudo hasta que se quedó agusto. Si le hubieran dicho hace
una semana que Oliver iba a pasar tanto tiempo cerca de él, Roy no se lo
hubiera creído.
Al parecer se está comportando casi como su padre
ResponderBorrarOjalá Oliver siga así 😢 jaja lo amo y me desespera a la vez
ResponderBorrarLa otra no la leí solo el comunicado por eso empezaré a comentar este capi, no sé mucho de esta serie comic o como se llama, pero veo que escriben seguido de Roy muchas escritoras, el chico me agrada y su padre o bueno el adoptivo por lo que leí en la wiki se está portando muy bien eso me gusta, me encanta la relación paternal.
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