martes, 16 de abril de 2019

Demasiada Libertad... capítulo 4


Bueno, eso había sido suficiente. Había tenido el peor día, ¿y ahora Dinah estaba rompiendo con él?

-¿Estás rompiendo conmigo?... ¿Por qué, exactamente? ¿Porque no soy el padre perfecto? ¡Está bien! ¡No quiero al hijo que tengo, ¿por qué demonios querría más contigo?!-
-Bravo- se escuchó de repente- Y el premio al papá del año es para Oliver Queen- soltó Roy bastante cansado, y esque era difícil dormir con tanto grito. La verdad es que hubiera preferido no meterse en discusiones ajenas, pero una cosa era sospechar que resultaba un tanto inconveniente y otra muy distinta escucharlo fuerte y claro de la boca de su "papá".
Oliver se congeló cuando escuchó a su hijo porque, para ser honesto, había olvidado que el chico estaba allí ... pero también, había estado tratando de devolverle las palabras a Dinah. No había querido lastimarlo a él.
-Roy... estás despierto- se acercó al chico- Yo ... lo siento. No quise que tú escucharas eso-
-Lárgate ya o le hablo a la trabajadora social- ese día había sido complicado y había escuchado varios comentarios bastante desagradables, pero ese había sido el colmo.
-Hijo, sólo estaba molesto con Dinah... sabes que te amo... pero me iré si eso es lo que realmente quieres.-
-Y ya no me digas así, saliendo de aquí me voy a otro lado- hacía trabajos con Jason de repente, no necesitaba el dinero del tipo- Porque a fuerzas tampoco, y digo, si soy una carga desagradable que odias tener y aparte ni me quieres, yo no tengo nada que hacer en tu casa-
Oliver sabía que había cometido un error. Cada parte de él quería huir de la situación, pero no podía dejarlo así. Agarró los hombros de Roy para que pudieran mirarse a los ojos.
-Lo siento mucho. Lo siento. Yo... no siempre es fácil. Sé que no tengo mi vida en orden y digo estupideces. Sé que no siempre nos llevamos bien, pero te quiero en casa. Tú haces mi vida mejor-
-¿Y entonces por qué nunca quieres estar conmigo y por qué te fastidia tanto? Tú ya no haces mi vida mejor, mira dónde estoy-
-No es que no quiera estar contigo... es sólo que tengo tantas cosas en la mente.... Lo siento si no hago las cosas mejor para ti. Me iré... sólo... lo siento- repitió mientras soltaba los brazos de Roy. No miraría a Dinah. Estaba seguro de que ella lo odiaba.
Ella, sin embargo, lo siguió afuera. 
-Oliver, si gustas Roy puede vivir conmigo-
-...- lo que realmente quería era comenzar el día de nuevo- Si eso es lo que él quiere...-
-Te estoy diciendo a ti porque debe ser lo que tú quieras-
-Dinah... no le estaba mintiendo. Él es mi hijo, lo quiero en casa.-
-Bueno, entonces pruébalo, digo, no lo culpo por no creerte-
-Voy a intentarlo- claro, en realidad Oliver no tenía ni idea de cómo cambiar...
-Ya me voy yo a mi casa, para que te quedes en el sillón-
-Gracias a... - estaba a punto de decir “amor” pero se lo tragó. Cuando volvió a entrar, miró al chico- Dinah se fue... ¿necesitas algo?-
-Que ella regrese y tú te vayas-
Oliver fue al sofá y cerró los ojos. ¿Qué había esperado? Esto no iba a ser fácil. Agarró su teléfono y comenzó a revisar sus mensajes.
Y esque a lo mejor bajo otras circunstancias, Roy estaría emocionadísimo de estar en el mismo cuarto con Oliver durante un tiempo indefinido, pero había sido un día de lo peor.
-¿Quieres que apague la luz?- preguntó Oliver mientras mandaba un mensaje a Bruce. "Roy está en el hospital. Gracias por decirme que estaba enfermo. Estará bien, ¿pero quizás los chicos puedan pasar mañana para animarlo?"
-No me hables- Roy se volteó para intentar dormir. Usualmente hablaba hasta por los codos y casi siempre estaba sonriendo cuando Oliver tenía que estar ahí con él, pero justo en ese momento no andaba de ánimos, no tenía ni ganas de interactuar con él y de milagro no estaba llorando.
Oliver suspiró y fue a apagar la luz, esperando que el día siguiente fuera mejor. Lamentablemente, no tuvo una buena noche de descanso en el sofá y, a las 6 de la mañana, se había ido a buscar una taza de café decente. Eso lo llevó a ir a casa a comer y ducharse, luego se detuvo en la oficina y luego regresó al hospital… para entonces era casi mediodía.
-¿Qué haces aquí?- Roy frunció el ceño cuando lo vio entrar.
- Sólo vine a ver a mi hijo favorito. Veo que sigues de malcriado ...-
Oliver le había traído un jugo de naranja y lo colocó junto a su cama, mientras se inclinaba para besar la frente de Roy. Estaba decidido a ganarse al chico.
-No me toques- se tapó con la cobija.
Oliver se rio, de buen humor.
-Deja de estar enojado conmigo- sabía que Roy lo superaría pronto, siempre lo hacía, ¿no es así?- Vamos, veamos una película y comamos comida chatarra-
Oliver sabía que tenía un cierto encanto. Era bueno para dedicar tiempo a alguien y hacerle sentir como la persona más importante del mundo ...
-Ya comí- fue muy cortante- Y no quiero ver películas-
-Oh- Oliver suspiró. ¿Por qué Roy era tan difícil? Lo dejó solo para sentarse en "su sofá" y trabajar en su computadora portátil. El silencio fue horrible, así que cuando Dick y Jason llegaron para saludar, se puso de pie y les sonrió.
-¡Chicos, estoy tan contento de que hayan venido! ¡Roy, tus amigos! ¿Quieren pizza? ¡Les conseguiré una pizza!- él solo quería salir de allí.
-Es un hospital, no puedes meter pizza- Roy rodó los ojos.
-¿Cómo te sientes, Roy?- Bruce entró también.
-Mejor, gracias- Roy cambió el tono.
-¿Sí?- pregunto Dick- ¿Necesitas algo? -
-Gracias, Dick, ya me siento mejor- ahora con sus amigos sí sonrió.
-Oliver, ¿Tienes un minuto?- le preguntó Bruce, dándole a entender que si podían hablar en el pasillo.
Oliver siguió sonriendo, incluso cuando asintió con la cabeza a Bruce y salió al pasillo. Fue entonces cuando su sonrisa desapareció.
-¿Qué?-
-Hablé con Dinah... Toma- le entregó una tarjeta- Es la abogada que me ha apoyado cuando he tenido problemas con Protección Infantil- Había tenido algunas situaciones con Jason no tan sencillas.
-Oh... Gracias, Bruce- ¿Entonces esto no iba a desaparecer mágicamente? ¿Por qué estaba Dinah hablando con Bruce? Oliver no pudo evitar los celos- Espero que me pueda ayudar. Que estupidez, ¿no?-
-Bueno, comprendo que ellos no saben mucho de la situación, pero era obvio que lo iban a reportar- Pobre Roy, de seguro estaba muy asustado...-
-Bueno ... sí, supongo que tienes razón. Pero no es como si yo tuviera la culpa, ¿verdad? Quiero decir, que yo no pueda CONTROLAR lo que él hace... pero bueno, sí, supongo que estaba nervioso... pero sólo me ha estado atacando, así que no sé cómo se sintió. No me ha hablado-
-Bueno, no es tu culpa... Del todo- no pudo evitarlo- No te lo tomes a mal, ¿Pero cómo vas a controlarlo si no lo ves?-
-Creo en la libertad, en ser independiente, Bruce. Mis padres fueron así, ...era casi como si hubieran estado muertos- mierda... De repente recordó con quién estaba hablando- Lo siento...-
-No te preocupes. Y está bien, así fueron tus padres, ¿Cómo te ayudó eso a ti? ¿Cómo le ha ido a Roy? Sé que hubo algo respecto a drogas, ¿Qué vas a hacer?-
No es que Bruce quisiera atacarlo, es sólo que no entendía cómo después del día anterior, Oliver siguiera con las mismas ideas.
-Bueno... he tratado de no pensar en las drogas... o en cualquier otra cosa. Sé que realmente no estoy de acuerdo con algunas de las cosas que haces, estoy seguro de que el sentimiento es mutuo ... pero no tengo idea de qué hacer. ¿Algún consejo?-
-¿No pensar en eso? ¡Oliver, estás hablando de drogas inyectables y Sífilis! ¡No lo puedes ignorar!-
Oliver preferiría estar en un crucero ... pero esta era su realidad. hijo drogadicto. Supuso que no debería decirle eso a Bruce.
-Bueno, ya, sé que no puedo ignorarlo... ¿Debería enviarlo a un centro de rehabilitación? -
-Bueno, si es sumamente grave podrías considerarlo, pero yo lo que haría es intentar tratarlo en casa con apoyo psicológico si es que es posible. No creo que Roy necesite estar internado, es decir, no es como que no pueda vivir una hora sin drogarse... Que yo sepa-
-No ... no creo que ese sea el caso- pero Oliver realmente no lo sabría. ¿Por qué no podía simplemente arreglar esto con dinero?- Sólo quiero ser su amigo... esto de ser padre no es lo mío-
-¿Qué dijiste?- Bruce no cabía en sí de incredulidad...- Espero que Roy no te escuche decir eso jamás, sería cómo decirle que fue un error adoptarlo porque "ser padre no es lo tuyo"-
-Por favor, no me des sermones. No soy uno de tus hijos- Oliver frunció el ceño. - Estoy tratando de mejorar- "Desde ayer”, pensó para sí mismo.
-Pues no lo veo... No eres su amigo, eres su papá. Y mira, tú sabes... Si quieres que Roy se muera de SIDA, neumonía o de una sobredosis, adelante, sigue dándole "libertad e independencia"- entró al cuarto resignado.
Por tipos así, los padres solteros tenían mala fama.
Cuando Bruce volvió a entrar, Dick le sonrió.
-¿Dónde está Ollie? -
-De seguro sólo está revisando algo, ya vuelve-
-Por mí que no lo haga- soltó Roy como si nada.
-¿Cómo?- Jason no se sabía aún la historia del día anterior- ¿No quieres que esté aquí?- y no es que Jason tuviese la mejor relación del mundo con Bruce, pero si él estuviera en el hospital, por supuesto que lo querría ahí. 
-Yo sí, pero él no, y tampoco está padre que esté conmigo a fuerzas-
-Estoy seguro que no es así- mintió Bruce por el bien del niño.
-Claro que sí, se nota que preferiría estar de vacaciones-
Dick escuchó el intercambio con curiosidad. Para él, Oliver era cool y Roy tenia suerte.
-Parecía estar de muy buen humor... Tal vez sólo estás imaginando cosas, amigo-
-Claro que no, Oliver no quiere batallar- repuso- Por eso le valgo-
-Roy, eso no es verdad- intervino Bruce.
-Sí es, ¿por qué crees que estoy aquí?-
-¡Oh, es cierto!- exclamó Dick- Tu padre le envió un mensaje a mi papá y nos pidió que viniéramos para animarte. Le importas totalmente- le dijo Dick a Roy, tratando de hacerlo sentir mejor.
-Eso es mierda, ayer dijo que no me quería-
Bruce trató de no maldecir por lo bajo.
-Seguramente escuchaste mal- insistió.
-Seguramente no-
-¿En serio? -
-Y que era una carga que odiaba, así que por mí que se quede afuera- Y esque de seguro Ollie había sido bastante sincero porque antes le gustaba pasar tiempo con Roy y estaba en casa, y ahora era todo lo contrario.
Cuando Oliver finalmente decidió que había tenido suficiente 'espacio personal', volvió a la habitación del hospital, excepto que ahora todos lo miraban con furia. '¿que demonios?'…
-¿Podemos hablar?- Bruce le preguntó nuevamente. Sin esperar respuesta, echó a andar y salió al pasillo.
Oliver siguió a Bruce.
-...¿Qué?-
-¿Una carga que odias y que no quieres? ¡¿Qué demonios pasa contigo, Queen?! ¡Uno no le dice eso a la gente cuando están en el hospital! ¡Uno no dice eso y ya!-
-¡No me grites! Estuve bajo mucho estrés... y no dije que era una carga que odio... sólo una carga en general... -Oh, mierda. Incluso a los oídos de Oliver eso sonaba increíblemente horrible.
-Pues eso no es lo que Roy escuchó... Mierda, con razón te enviaron a una trabajadora social ¿Sabes qué? Tenías razón, lo tuyo no es ser padre-
Oliver cerró los ojos. Genial, Bruce lo estaba juzgando. ¿No se suponía que esto eran amigos?
-¡Mira, tus juicios NO están ayudando! ¡Ya te dije que estoy tratando de cambiar!- se estaba enfadando- No me digas que tú eres el padre perfecto-
-Al menos quiero a mis hijos-
-¡Ese comentario fue sacado de contexto!- se defendió Oliver- Quiero y amo a mi hijo… Vamos, Bruce, tú sabes que eso es verdad-
-¡Pues esque no parece! O a ver, entra ahí y dime que Roy tiene la pinta de un muchacho al que aman sus padres-
Amaba al chico ¿verdad? Sí... tal vez realmente no lo había mostrado muy bien.
-Bruce, Roy está actuando de esta manera porque está enfermo. Todo estará bien en unos días, ya lo verás -
-¿Tú crees eso? ¿Enserio?-
-Bueno, le conseguiré un psicólogo. -
-Mejor consíguele padres de verdad-
-¿Señor Wayne?- se escuchó de pronto la voz de la trabajadora social de la noche anterior, a quien al parecer Bruce reconoció.
-Señorita Bennett, ¿Cómo se encuentra?- le dedicó una sonrisa amable y le estrechó la mano.
-Me encuentro bien, gracias... ¿Ustedes se conocen?-
Oliver frunció el ceño.
-No muy bien, estoy descubriendo- estaba molesto. Necesitaba nuevos amigos, una nueva novia, y unas vacaciones...- Nuestros hijos son amigos-
-La Señorita Bennett  y yo nos conocimos cuando Jason se rompió el tobillo saltando del playground de McDonald's- le explicó Bruce a su amigo- ¿Es ella quien lleva tu caso?-
-Supongo que sí-
-Disculpe, señorita Bennett, ¿Tendrá un segundo? me gustaría tratar con usted un tema de suma importancia en el que estoy seguro podemos llegar a algún acuerdo...- comenzó la conversación más larga y confusa que Oliver hubiera presenciado jamás...
-Señor Queen- la mujer se volvió a dirigir a él después de rato- Me comenta el señor Wayne que usted tiene los intereses de su hijo como prioridad y que haría lo que fuera con tal de mantenerlo a su lado-
“Uhm, duh,” Oliver pensó, pero se aclaró la garganta y trató de sonar educado.
-Sí, por supuesto, lo único que quiero es que mi hijo esté seguro, feliz y bien adaptado. Roy es mi prioridad absoluta-
-Muy bien. Sinceramente, yo no lo veo así, pero tomando en consideración el buen nombre que el señor Wayne ha logrado mantener ante los servicios de Protección Infantil estos últimos años, estoy dispuesta a interceder por usted bajo una sola condición. Ir a consultarla con el juez en turno y le notificaré en algunas horas. Estoy segura que si usted es un padre tan devoto, no tendrá problema alguno. Hasta luego, señor Wayne-
-Buen día- se despidió Bruce educadamente.
-Buen día- la mujer le regaló a Bruce el "Buen día" que el día anterior le había negado a Oliver.
-A ella la conocí cuando nos enviaron gente de Protección Infantil porque Jason saltó de los juegos de McDonald's, ¿Recuerdas?- comentó Bruce cuando la mujer se fue- Después de algo de esfuerzo, nos ganamos a la trabajadora social. No es tan mala, creo que la pude convencer de darte una oportunidad más-
-¿Y eso por qué?- Oliver preguntó, todavía inseguro de que el mundo entero no estaba en contra de él- Que paso con “Mejor consíguele padres de verdad”?-
-Dudo que eso lo vayas a hacer… Aunque si no quieres la oportunidad...-
-Por supuesto que la quiero- admitió Oliver, aunque para ser honesto, más bien no quería lidiar con una cosa más- Voy a hablar con él. Voy a cambiar, ya verás- tal vez si lo repitiera, él mismo empezaría a creerlo.

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