Demasiada Libertad, capítulo 22

-Lo que tenga que durar, hay que llegar a una resolución acerca del tipo de apoyo adecuado para Roy-

-Perfecto. Bien Roy, habla con ella- 

-De hecho, señor Queen, si no le molesta, quisiera preguntarle también algunas cosas a usted. ¿Cuándo se dio cuenta de la situación y de qué manera?-

Oliver recordó los últimos días.

-Acababa de regresar de un viaje de negocios y un amigo me llamó para decirme que Roy estaba enfermo. Mi hijo me contó cómo posiblemente tenía VIH... Lo llevé al hospital y lo examinaron- Luego ignoró la situación, pero no iba a decirle eso a la psicóloga- Y luego mi novia le preguntó más sobre su uso de drogas... Fue entonces cuando me di cuenta de la gravedad de la situación-

-Roy, desde hace cuánto consumes y qué sustancias?-

-No sé, no me acuerdo-

-¿Nos dijo que fue hace 11 meses? Algo así, ¿no, Dinah? -

-Sí, mariguana, cocaína y heroína-

-También lo encontré bebiendo con sus amigos hace unas noches... y se ha escapado de casa dos veces-

-Dinah, ¿Tú consideras que sea necesario que se le interne?-

-Debe ser joda...-

-Sinceramente, no. Sé que puede pasar tiempo sin consumir mientras esté bajo supervisión, y no padece síndrome de abstinencia en menos de 24 horas... Además, las huidas de casa no han sido con el fin de consumir-

-Muy bien... ¿Señor Queen?-

Oliver ni siquiera miró al chico.

-Yo... no creo que sea necesario, no-

-Bien... Entonces el proceso en estos casos es complejo. Si bien la situación no está en el peor punto en el que podría estar, no debemos dejar que llegue a ello. ¿Con quién vive el muchacho?-

Ya se había dado cuenta que Roy no estaba precisamente en estado de colaborar.

A la pregunta, Oliver levantó la mano.

-Vive conmigo. Nos estamos quedando en la casa de un amigo ahora mismo, pero probablemente sólo por una semana más, y luego nos mudaremos a....- él realmente no sabía dónde vivirían

-Bueno, es importante, en caso de ser posible, evitar el lugar donde el consumo tomaba lugar para evitar recaídas por depresión. Y bueno, realmente lo más importante es que al menos por el momento Roy no esté sin supervisión en lo absoluto. Lamentablemente, las adicciones no son cuestión de voluntad, el muchacho requerirá apoyo todo el tiempo al menos el primer año aproximadamente-

-Bueno, no estamos planeando regresar a nuestra antigua casa, no estoy seguro de a dónde nos mudaremos todavía. Tal vez Dinah se apiade de nosotros y nos permita vivir con ella- Bromeó-Pero hablando enserio... yo planeo estar con él todos los días para vigilarlo-

-Muy bien. Eso es lo ideal, y me refiero a ir por él a la escuela, tenerlo en el trabajo con usted hasta que salga, hacer visitas e inspecciones periódicas lo más frecuentemente posible a su habitación...-

Oliver asintió, un año sonaba excesivo. Todo lo que ella decía sonaba excesivo, pero él asintió de todos modos.

-Sí, por supuesto-

-¿Cómo suena eso Roy? Has estado muy callado ...-

Roy no le contestó y siguió mirando para cualquier otro lado. 

-Hay medicamentos que Roy podrá tomar cada 4 horas para reducir la ansiedad y ayudar a Roy en el proceso de desintoxicación, esa va a ser responsabilidad suya también-

-Cada CUATRO horas?- Excesivo. Excesivo- Muy bien... pondré una alarma en mi teléfono-

-Muy bien. Ahora, pocas veces alguien consume drogas sólo por hacerlo. Está claro que toda la familia requiere apoyo psicológico-

-Bueno, creo que en el caso de Roy, él solo estaba aburrido y ha estado demasiado solo, pero ... no creo que tenga nada que ver conmigo, es decir, no necesito ningún apoyo psicológico.-

-Eres un imbécil- Roy ahora sí habló- ¿Enserio crees que me aburrí y ya? Demonios, suenas como si te fueras tres malditas horas-

-Bueno, si no hablas, tengo que asumir las cosas. También dije que probablemente te sentías solo-

-¿Probablemente? No mames, ¿Estás sordo o qué?-

-Bueno, definitivamente te sentiste solo. Te dejé solo demasiado, no entiendo cuántas veces necesitas que me disculpe-

-No sirve si vas a volver a hacerlo- Roy estaba molesto, pero también tenía los ojos y la nariz roja, con la cara toda manchada de lágrimas.

-Ya he dicho que no te voy a dejar solo- Oliver puso los ojos en blanco.

-Te vas a ir de viaje, no seas falso-

-Ya dije que te llevaré conmigo. ¡Tú eres el que está sordo!-

-¡Pues tú dijiste antes que no, y yo no estoy jugando!-

-¡Juro que haces las cosas 100 veces más difíciles de lo que tienen que ser. ¡Sólo te pedí que hicieras tu tarea! -

-Dijiste que no me ibas a llevar a ningún lado si no subía el promedio. ¿Tú crees que estoy jugando o qué?-

-No es que espero que tengas calificaciones perfectas. Sólo quiero que pongas un poco de esfuerzo en ello. No entiendo por qué no puedes decirme cómo te sientes con calma. Todo es un drama contigo-

-Porque siempre que te digo algo después me haces sentir mal-

Tal vez estaba siendo injusto, definitivamente le había dicho a Roy que no lo iba a llevar a ningún lado hasta que mejorara su promedio, y ahora estaba cambiando las cosas y probablemente haciendo que su hijo pareciera dramático e irrazonable frente la psicóloga.

-...Lo siento-

-Tú siempre lo sientes y sigues igual-

-¡Eso no es cierto, dame un poco de crédito! Me estoy esforzando por hacerte feliz y todo lo que haces es... esto- Señaló al chico, que estaba enojado, que tenía manchas de lágrimas en las mejillas, y que (según Oliver) estaba actuando de manera irrazonable.

-No te estás esforzando en nada. Según tú, ¿Qué has hecho, eh? ¿Faltar un domingo al trabajo Woah, impresionante-

-Bueno, estoy aquí ahora mismo cuando...- Se detuvo antes de decir que preferiría estar en cualquier otro lugar- Estoy aquí tratando de apoyarte-

Roy rodó los ojos y volvió a sorber mocos.

-Pues haces un pésimo trabajo- no pudo contenerse. Bruce, Barry, Hal o cualquier otro de los papás de sus amigos los estarían abrazando o al menos no los estarían fastidiando.

-Gracias, lo haces tan fácil- murmuró Oliver, sarcástico.

-Pues regálame con Dinah si no te gusta. Lo único que me hubiera gustado en todos estos meses es que me hubieras llevado contigo aunque fuera una vez, pero ya vi que ni eso-

-Ya es suficiente, Roy, no te voy a regalar, y ya te dije que irás conmigo a Chicago la próxima semana- ¿Le había dicho al chico?- Así que deja de tratar de hacerme sentir mal-

-Esque a fuerzas no quiero que me lleves- se sentía muy estúpido, pero no podía parar ni las lágrimas ni los mocos- ¿Por qué no te gusta estar conmigo?- era la pregunta más sincera que le había hecho en meses, y la verdad estaba derrotadísimo.

Oliver hizo una mueca. Esto era incómodo. ¿El niño no podría haberle preguntado eso cuando estuvieran solos? No quería una audiencia... Aún así, ver a Roy llorar le rompía el corazón, así que fue a abrazarlo, esperando que no le dieran un codazo.

-Roy... Nadie me está obligando a hacer nada. Quiero que estés conmigo, quiero que te mejores... Eres mi hijo, mi bebé- Oliver le sonrió- Te amo-

Y esque Roy tampoco hubiera querido público, pero se sentía del asco en ese momento, no después. 

-No te creo- aún así se dejó abrazar porque eso casi nunca pasaba.

Oliver lo abrazó con más fuerza antes de soltarlo, porque una vez más, se sentía incómodo, pero dejo una mano en el hombro de su hijo.

-¿Por qué no me crees? -

-Porque siempre dices eso y todo sigue igual-

-Las cosas van a cambiar, ya verás... pero podrías hacer las cosas más fáciles, sabes. No amo tu actitud- Probablemente se podría haber guardado ese último comentario.

-Ni yo la tuya- se pasó el brazo por el rostro.

-Pero aun así, ¿me amas? -

-...Sí-

-Bueno, es lo mismo para mí, entonces, si los dos nos amamos, me parece un poco ridículo estar en batalla constante, ¿no crees?-

-Pues esque no es eso, esque...- comenzó a sonar el teléfono del tipo- Ya contesta esa mierda mejor...-

Oliver frunció el ceño.

-Podría ser una emergencia...- Siempre era a donde iba su mente, su excusaó.. pero solo se quedó mirando su teléfono sin hacer nada.

-Pues contesta, no vaya a ser importante- rodó los ojos.

- Sólo sigue, ¿qué estabas diciendo? - Apagó el teléfono, pero estaba ansioso por la llamada. Se estaba imaginando que su oficina estaba en llamas, o algo igualmente horrible.

-¿Seguro?-

-¡Sí! ¿Qué estabas diciendo?- Trató de no mostrar su impaciencia.

-Que aunque "me quieras mucho," tampoco sirve mucho si ni te veo ni escuchas nada de lo que te digo, te la pasas haciendo comentarios estúpidos y no puedo contar contigo cuando te necesito. Yo prefiero que te quedes en la casa conmigo si estoy enfermo a que me compres un teléfono- o una computadora o una tablet o una moto o lo que fuera.

-...Bueno. Lo entiendo. Quiero hacer esos cambios... pero Roy, tengo otras responsabilidades, ¿entiendes eso, verdad? No quiero que te enojes si no puedo estar contigo 24/7-

-Esque no puedes estar nunca- Entendía lo de no estar 24/7, pero Oliver estaba 0/7

-Estás exagerando otra vez, y eso es lo que me molesta. ¿He sido negligente a veces? Sí, pero no es como NUNCA he estado ahí para ti. Eso es muy doloroso para mí escuchar eso-

-Pues es la verdad, ¿Qué quieres que te diga?

-…Voy a vigilarte más, pero seamos claros, no quiero más uso de drogas. Ya no quiero que huyas de la casa-

-Pues no me hagas irme-

La expresión de Oliver se puso seria entonces.

-Ya hablamos de eso, si estás enojado conmigo, puedes ir con Dinah. Incluso puedes gritarme si quieres, pero no huir. Ya te advertí lo que pasará si lo haces de nuevo- Oliver no quería repetir su amenaza frente a las dos mujeres.

-Da igual...-

Oliver miró al chico con molestia, amenazándolo con los ojos.

-Roy-

-¿Qué?-

-No importa, hablaremos más tarde- Miró a Julia- Lo siento, ¿tenías más preguntas?-

-No por el momento, quizás mañana en mi consultorio a las 4-

-De acuerdo ...- Oliver quería que se fueran para ver de qué se trataba la llamada del trabajo- Gracias-

-¿Les damos un momento?-

- Sí, gracias-

-¿Te acuestas conmigo?- le preguntó Roy cuando se salieron Dinah y la psicóloga esa. No sabía si Oliver estaba enojado o no, pero se había sentido tan miserable con lo del viaje que se arriesgó a preguntar.