Llegamos al campo de futbol
donde habían quedado los chicos, Josephine parecía de lo más tranquila, me
desesperaba siempre tan apacible, y yo quería saber que estaba pensando
, y es
que… no es como que quisiera admitirlo, pero si me gustaba, era distinta, o sea
me refiero a que todas las chicas de California se morían por salir conmigo o
con uno de mis hermanos solo por quienes éramos, por nuestro apellido, pero
ella siempre me hacía sentir como si no existiera, cuando había llegado me
quería deshacer de ella, porque no la quería aquí porque mis hermanos y yo
habíamos inventado tantas cosas de ella, que era obvio que me desagradaba mucho
más de lo que debía, pero cuando la conocimos y me di cuenta que no le
importaba, nada, solo estaba ahí y por más comentarios que le hacía Easton no
parecía ni inmutarse, y yo había pensado que sería una niña llorona de la cual
nos íbamos a deshacer desde el día uno, y no, y eso la hacía más atractiva a
mis ojos, además de que era bellísima.
-¿Otra vez estás enojado?-Me
pregunto de repente.
-¿Cómo? –Negué con la cabeza.-
¿Por qué?
-Estas muy callado.
-Siempre soy callado.-Respondí.
-No es cierto, siempre hablas
hasta por los codos.-Insistió.
-Claro que no, solo que si no
hablo tu no hablas.-Rodé los ojos. –Eres muy misteriosa.
Ella se río, casi nunca me
sonreía ni nada de eso, a excepción de esa tarde que habíamos tenido una gran
comida hasta que había llegado el idiota de Daniel, y es que enseguida que lo
vio había sonreído contenta, nunca sonreía así conmigo, era como si cuidara sus
movimientos cuando estaba conmigo.
-No lo soy, solo soy yo.-Se
encogió de hombros.-Oye ¿Y se supone que me quedé aquí sola viéndote jugar?
-Si.-Conteste- Verme anotar
touchdowns
-Que presumido.-Soltó.-No
entiendo para que querían que viniera.
-Porque quería seguir
contigo…-Solté.
-¿Ah sí?-Las mejillas se le
encendieron.-Ya Reed, deja de jugar.
-No estoy jugando, hablo
enserio.-Insistí.
-No creo que… -Comenzó pero fue
interrumpida.
-Vamos, Reed.-Me rodeo con el
brazo Henry.-Hermanita, espéranos en las gradas, y no hables con extraños,
puedes echarle porras a Reed-Le guiño el ojo.
Josephine frunció el ceño, y
rodo los ojos.
-Que se diviertan-Soltó
caminando a las gradas.
-¿Qué te traes eh?-Le pregunté
de mal humor a Henry quitándole el brazo.
-Nada, hermano relájate.-Me
sonrío divertido.-Toda tuya.
-Aposte con Easton.-Dije
enojado.
-Ya lo sé, ¿Por qué te pones
así? Es solo una apuesta, ¿no?-Alzó una ceja divertido, a lo cual le conteste
con un gesto de mal humor.-Ya hermano, si te gusta no importa, a lo mejor nos
apresuramos con la chica, ya quita tu cara y vamos a jugar.-Me dio un
empujoncito en el hombro y se fue.
Henry siempre era así todo se
le hacía súper fácil, aunque para él si era todo muy fácil, el americano, la
escuela, las chicas, todo, lo que quería Henry, Henry lo tenía, no es que lo
envidiara pero era todo lo tenía tan fácil siempre, porque era el tío que todas
quisieran, era listo, jugaba americano, no era mujeriego, y le caía bien a todo
el mundo, A TODOS, vamos que cuando le gustaba una chica le gustaba enserio, no
es como que yo fuera ahí ligándome a todas las chicas, pero no era Henry.
-¡Reed!-Me gritó Easton, así
que corrí hacía ellos.
Gradas
(Josephine)
Estaba mirando Instagram, la
verdad es que nunca había sido muy fan del futbol americano, pero me estaba
rondando en la cabeza dos cosas, Catherine y Reed, la primera porque no sabía
cómo diablos ella y Henry se habían conocido, no es como que Henry fuera un
psicópata y lo hubiera inventado ¿no? Porque igual Reed había mencionado que a
su madre y a Henry les encantaba Nueva York, y nuestros padres eran amigos,
pero yo no recordaba que conociéramos a Ian o a la madre de los chicos antes,
lo recordaría y más si Henry parecía tan loco por ella, sus ojos se habían
dilatado nada más de ver la foto, y es que no podía negar que mi hermana era
hermosa, pero… si nos había confundido simplemente tenía tiempo que se habían
conocido o no sé… quería mandarle un mensaje a Catherine para preguntarle pero
no sabía si era una buena idea, tal vez otro día que hablara con ella.
Y luego estaba Reed quien había dicho que quería estar conmigo, era tan extraño
primero era uno y de repente se enojaba, no lo entendía, aparte no quería que
estuviera jugando, porque vamos que si me gustaba, pero ¿Qué tal si él y sus
hermanos si estaban planeando una idiotez?
-Jo.-Me saludó Danielle
sentándose junto a mí.
-Danielle.-Le sonreí.-Pensé que
había una fiesta en tu casa.
-Se pospuso.-Rodó los ojos.-La
llegada de Henry Archer fue un gran acontecimiento.
-¿Ah sí?-Pregunté con
desinterés.
-Sí, entonces se cambiaron los
planes, me hubieras contado que llegó Henry, es súper mono, ¿no crees?- Me
encogí de hombros. –Vamos que me vas a decir que los hermanos Archer no te
vuelven loca.
-Pues sí me vuelven
loca.-Conteste- Pero no de esa manera.
-Que rara eres. Tendrías que
admitir que están guapísimos.-Me sonrió cómplice.
-Pues sí…-Coincidí, no podía
negar que los tres estaban guapos pero no entendía la insistencia, no le diría
que el único que me gustaba era Reed.- ¿Te gusta alguno de ellos en particular?
-Pues…-Se quedó pensando.-Creó
que no, solo me parecen muy guapos, aparte a ninguno de los tres les agrada
Daniel, así que no es como seamos amigos y así.-Se explicó.
-¿Por qué no les
agrada?-Pregunté.
-Pues porque Ian Archer es un
estafador-Soltó.- Él y mi papá eran socios y al final resulto algo que era algo
fuera de la ley, pero Ian demando a mi padre porque según él mi padre era él
que había querido lavar dinero, pero como tenía mejores abogados que mi padre
no pudimos ganarles, y desde entonces mi hermano los odia, bueno y ellos a él.
No podía creer lo que había
dicho esa niña, porque Ian no podía ser así, mis padres habían hecho muchos
negocios con él, y jamás vieron algo turbio, aparte el día que yo le conté a
Ian de ellos, no me dijo nada malo de ellos, solo dijo que eran buenos chicos y
ya, algo no me cuadraba en su historia, así que solo asentí, tal vez Danielle y
su hermano no eran la mejor compañía.
-Jo, hola-Ahora llegó Daniel.-
¿Todo bien?
-Si ¿por?-Pregunté extrañada.
-Por la escenita de
Reed.-Agregó.
-Si.-Conteste seca.
-¿Por qué se fue así eh? Ya sé
que es un idiota pero no debería portarse así contigo.
-No creo que sea de tu
incumbencia.-Respondí levantándome-Luego los veo, ¿de acuerdo?
Fin
del partido (Reed)
Habíamos ganado, pero yo estaba
furioso otra vez el imbécil de Wright se había sentado con Josephine, y ella no
parecía incomoda, lo cual no entendía porque me molestaba tanto, pero no la
quería cerca de él, así que me metí a cambiar de muy mal humor a pesar del buen
humor de mis hermanos.
-¿Qué te pasa?-Me pregunto
Easton.
-Wright estaba hablando con
nuestra hermanita.-Se burló Henry.
-Cállate-Le ordene.
-Relájate.-Respondió
Henry.-Amigo, esa niña no le hará caso a él ni de broma.
-Ni a ti.-Se burló Easton.-Solo
es un juego Reed, ¿no?-No dije nada.- Hahaha ¿Qué te dije? Si le gusta.
-Ya cierra la boca.-Aventé a
Easton del hombro.
-Cálmate ya.-Dijo Henry
jalándome por el hombro.-No peleen, solo es una niña Reed, si te gusta ya está,
haz lo que quieras y tu-Volteo con Easton.-Ya déjalo…
-Si papá.-Gruño- Váyanse a la
mierda…-Paso empujándome y salió de ahí.
Henry y yo nos miramos, mi
hermano mayor negó con la cabeza, salió tras Easton, y es que ya sabía que se
iba a enojar, pero no tenía motivos si habíamos dicho que nos íbamos a deshacer
de ella, pero tampoco era tan malo como pensábamos, y Josephine no era lo que
esperábamos, tal vez si me había portado como un idiota, pero Easton también lo
estaba haciendo.
Salí de los vestidores, fui en busca de Josephine, iríamos a la casa de uno de
los chicos, seguía sentada en las gradas, llegué y toque el centro de su
celular para interrumpir lo que estuviera haciendo, frunció el ceño pero cuando
me vio, se relajó su cara.
-¿Viste que partido?-Le sonreí.
-Sí, gran partido.-Soltó
sarcásticamente.-Apenas y alcanzaba a verte.
-Pues claro estabas hablando
con el idiota ese.-Solté sin pensar.
-Oye, Reed ¿Qué te
pasa?-Preguntó un poco extrañada.
-Nada, solo no me cae bien ese
tipo, ¿vamos a la fiesta?-Pregunté.
-Vamos.
La fiesta estaba bastante buena,
no había tomado más que dos vasos de cerveza, tampoco quería que Ian se
molestara más de lo que ella estaba con nosotros, no quería problemas, y más
porque de por si nuestro verano ya estaba bastante arruinado aunque seguro era
más fácil acercarme a Josephine si no teníamos nada que hacer.
Busqué a mis hermanos con la
mirada, localice enseguida a Henry estaba con su ex compañero de equipo y con
otros chicos platicando enérgicamente, tan tranquilo como siempre, luego
encontré a Easton con una chica de cabello largo color castaño, ella se reía y
él se hacía el tonto, luego regresé a Josephine, estaba tecleando en su
celular, me asomé a ver, a quien escribía ya sé que estaba mal, pero aproveche
que estaba distraída y yo era más alto. Estaba hablando con Danielle Wright:
D: ¿Dónde estás? ¿Viniste a la
fiesta?
J: Estoy con Reed. ¿Tú?
D: Con las chicas, ¿vienes?
J: Al rato.
-¿Se te perdió algo?-Me
preguntó.
-¿Qué? –Me hice tonto.- ¿De qué?
Ella rodó los ojos y negó con
la cabeza.
-¿Y todos ellos son tus
compañeros de escuela?-Pregunto
-Sí, la mayoría… creo-No tenía
ni idea de si conocía a toda la gente de ahí, aunque muchas caras me eran
familiares.
Josephine era una chica muy
culta, no sabía como pero habíamos empezado a hablar de libros, de obras de
teatro, de música, en ese momento amé a mi madre por haberme obligado a
acompañarla a conciertos y obras de teatro, los libros eran algo común en mi
casa, todos leíamos como si fuera lo más normal, así que no estaba como un
perdedor escuchándola, teníamos conversación, aunque se me hacía el peor lugar
donde podíamos tenerla, era una fiesta, solo para emborracharnos después de un
partido, pero podíamos ir por un café… aunque seguro que nadie quiere un café
en verano con el calor de California, pero ¿Un helado? No sabía a donde salían
las chicas como ella, jamás había salido con una chica formalmente, solo me
liaba con ellas a ratos, a veces las invitaba a cenar o a fiestas, pero con
ella seguro no sería tan fácil que eso, con que no tuviera que ver cine de arte
como con mi madre…
-¡Reed!-Me hablaron Henry e
Easton quienes estaban en grupo con los otros chicos.
-¿Vamos?-Le dije a
Josephine.-No les puedo decir que no…
-Ve-Me sonrió-Voy con Danielle
y sus amigas, te veo al rato.
Fiesta
(Josephine)
Después de una gran
conversación con Reed, me dirigí con Danielle y sus amigas como había quedado,
ellas me agradaban bastante, aunque lo que ella me había contado de Ian todavía
me rondaba la cabeza, y es que no quería indagar con Reed, o con el mismo Ian,
le había pedido a mi madre que me llamará al día siguiente, también había
intentado hablar con Cath pero eran como las siete de la mañana en Ámsterdam y
dudaba que estuviera despierta.
-Hola.-Saludé a las chicas
llegando con ellas.
-Hola.-Me sonrió Danielle.-
¿Qué tal tu velada con Reed?
-Bien, creo…-Sonreí de vuelta.-
¿Y ustedes qué tal?
Empezamos a hablar de tonterías
sobre los chicos, y comenzaron a explicarme quienes eran los viejos miembros
del equipo y quienes eran los nuevos, me preguntaba porque Daniel no estaba en
el equipo, pero suponía que era porque no tenía interés de estar, tampoco
quería preguntar por él, porque no quería que malinterpretaran nada, era buena
onda pero no me gustaba, y Danielle era ese tipo de chica que solo por
preguntar ya creía mil cosas.
Las amigas de Danielle se fueron a buscar a unos chicos y nos quedamos solas,
me platico un poco de la escuela, y yo le platique de la escuela en Nueva York,
hasta que llegó Daniel, y ella de pronto dijo que tenía que hacer una llamada:
-¿Te gusto el partido?-Me
preguntó.
-Sí, estuvo bien, ¿a ti?
-No me encanta el americano.-Se
encogió de hombros –Pero quería encontrarme contigo.
-¿Ah, de verdad?-Pregunté
sorprendida.
-Sí, Jo… sé que esto podría
parecerte muy rápido pero…-Se pasó la mano por la cara.-Me gustas.
-Daniel…-No sabía que
decirle.-Eres… me agradas, pero no me gustas…-Dije incomoda.
-A lo mejor aún no pero
escucha…-Me tomó las manos.-Si me dejas intentarlo…
-Daniel…-Comencé
nuevamente.-Yo…-Intenté quitarle las manos…
-¿Qué haces con este
tipo?-Llegó Reed de repente.
-Que te importa, Archer –Gruñó
Daniel.-Lárgate, estamos en medio de algo.
-A ver Daniel-Intenté quitar
mis manos nuevamente pero apretó.-Suéltame, ¿okay?
-No, tú no tienes por qué
estarle rindiendo cuentas a este tipo.-Me dijo enojado viéndome a mí y luego a
Reed.
-Que me sueltes…-Le pedí
nuevamente, no es que me estuviera apretando pero sabía que a Reed no le
gustaba para nada.
-¿No escuchaste? QUE LA SUELTES.-Le
ordenó Reed.
Y en lo que menos me di cuenta
Reed tenía en el suelo a Daniel, y lo estaba golpeando, Daniel más o menos se
defendía pero Reed llevaba la delantera.
-¡NO REED!-Intente tomarlo del
brazo.-Reed, no espera…
La bola de gente que nos rodeó
no tardó ni unos minutos, pero yo no podía meterme sino alguno me iba a pegar,
busqué a Henry o a Easton, pero cuando encontré al mayor de los Archer era
porque ya lo estaba quitando de encima de Daniel.
-¡Suéltame!-Gruño Reed
intentando zafarse.
-Cálmate, Reed.-Le dijo Henry,
y lo empezó a sacar de ahí, yo me fui tras ellos.
Henry prácticamente lo arrastro
hasta donde estaba el auto de Easton y lo empujo contra el carro.
-¿Qué pasa contigo?-Le gruñó
enojado.- ¿Qué te pasa?
-Nada, Henry.-Lo empujo.
-¡¿Estás loco?! No puedes
estarte metiendo en peleas estúpidas.-Continuo Henry dándole el empujón de
vuelta.
-No dejaba en paz a Josephine,
no te metas.-Reed aún parecía furioso iba a empujar a Henry, pero yo me metí en
medio.
-Ya, Reed.-Le apreté la
mano.-Por favor…
A Reed se le relajo la cara de
repente, aunque a Henry no, se veía muy molesto, me sentía muy culpable, a
pesar de saber que no tenía culpa de nadie, Reed no podía golpear a Daniel cada
vez que se me acercara, él no me gustaba, pero tampoco era para que Reed se
pusiera así, no me había hecho nada, no lo quería justificar, pero tampoco
quería sentir que él y Henry estaban enojados por mí.
-Váyanse a la casa, y si Ian
pregunta le dices la verdad.-Me miró a mí.
-No es para tanto…-Solté, no
quería llevarle la contra a Henry pero quería problemas para Reed.
-¿Crees que le haces un
favor?-Henry alzo un ceja.-Porque no lo haces Josephine, y deberías de…
-Ya Henry, cállate.-Le dijo
Reed.-Yo le digo a Ian, no fue mi culpa, así que déjanos en paz, no todos somos
perfectos como tú-Entrelazo las manos conmigo.-Vamos.
Reed y yo no fuimos directamente a
la mansión Archer, primero pasamos a una farmacia por toallitas para bebé, le
ayude a Reed a limpiarse la sangre de Daniel, porque literalmente él no le
había podido dar ni un golpe a Reed, o no uno visible.
-Qué asco.-Soltó cuando vio la
sangre seca en su playera.-Se la quitó.-Voy a tirar eso-La echo en la parte de
atrás del auto, y alcanzó su sudadera para ponérsela.-Lo lamento…
-No tienes que disculparte,
Reed, a mí no me hiciste nada, pero no puedo dejar de decirte que no tienes que
pelearte y menos por mí, Daniel no estaba haciendo nada malo, digo le pedí que
me soltara porque no quería que te molestaras más, y porque no quería que me
insistiera más, pero realmente no hacía nada malo.
-Lo sé… pero es que no sé… ese
tipo es un imbécil y cada que puede esta tras de ti, y…-
Se sonrojo de pronto.
-¿Y…?-Estaba confundida.
-No me gusta…-Soltó de
pronto.-No es una buena compañía, y no me gusta que estés con él.
-¿Estas celoso?-Le sonreí, no
lo quería poner en evidencia, quería que se calmara.
-¿De ese idiota? Jamás.-Volteo
al otro lado.
-Está bien.-Le puse la mano en
la pierna y le sonreí nuevamente.-No pasa nada.
-Bien, ¿quieres comer algo
antes de escuchar cómo me grita Ian?
-No gracias, escuchar a Ian me
revuelve el estómago.-No era mentira.-No tienes que decirle, yo no le diré nada…
-Pero Henry sí… -Suspiro.-Así
que vamos a mi destino tortuoso.
Cuando llegamos a la mansión
vemos la luz de la oficina de Ian con la luz prendida, me ofrezco a
acompañarlo, y me sorprende cuando me dice que no, y enseguida se me hace un
nudo en el estómago, Ian es un tipo estupendo pero cuando está molesto me hace
temblar.
-Pa…-Empezó Reed cuando
entramos.
-Hola chicos-Nos sonrío-¿Paso
algo? ¿Y tus hermanos?
-Aún en el campo… es que tuve
un pequeño problema…-Prosiguió- Me pelee con el idiota de Daniel Wright…-Ian
enseguida frunció el ceño.
-Fue mi culpa…-No pude
evitarlo.-Es que yo estaba esperando a Reed, y Daniel se acercó y me dijo que
le gustaba pero me tomó de las manos… y estaba muy insistente, cuando llegó
Reed le pedí que me soltara pero no me quería soltar… enserio lo siento Ian.
-Josephine, no tienes por qué
disculparte, de igual manera no es pretexto para meterte en peleas, Reed, ya lo
sabes, ¿no?
-Sí, ya sé, y en verdad que lo
lamento…-Suspiro Reed. -¿No volverá a pasar de acuerdo?
-Eso espero, porque es la
última vez que lo dejo pasar, ¿entiendes?-No sé si a Reed pero a mí me recorrió
un escalofrío por todo el cuerpo.
-Si.-Reed estaba muy serio como
para saber que pensaba o como se sentía.
Después de eso Reed y yo
salimos del estudio de Ian, no estaba segura de cómo decirle que me iría a mi
habitación y es que no sabía si él quería que siguiéramos juntos o irse a su
habitación:
-¿No quieres comer algo ahora
sí?-Pregunto.-Puedo prepararte algo…
-¿Sabes cocinar?-Dije
sorprendida.
-Más o menos.
Mansión
Archer (Henry)
La fiesta había estado bien,
hasta la escenita de Reed, y el encontrarme con que Easton estaba borracho, y
es que no entendía que tenían en la cabeza mis hermanos, no es que yo fuera
perfecto, pero siempre había sido muy cuidadoso con todo lo que hacía, y esto
me había traído a estar arrastrando a Easton a la una y media de la mañana, no
es que no pudiera caminar pero quería que se apresurara, e Easton era de esos
borrachos necios, así que estaba prácticamente obligándole y pidiéndole a la
vida que mi padre no lo descubriera, no quería más problemas con él, y tampoco
quería meterlo a él en problemas.
Entramos por el lado de atrás
donde está la alberca y ahí donde estaban las sillas de playa en una estaban
Reed, y Josephine besándose, vaya que mi hermano no estaba perdiendo el tiempo
con esa niña.
-Ya suéltame.-Me empujo Easton
zafándose de mi agarre.- ¿Ya viste quienes están aquí?-Soltó una risita.
Reed y Josephine se despegaron
enseguida y nos miraron, Josephine se alejó de Reed y se nos quedaron viendo:
-¿Estas borracho?-Frunció el
ceño Reed levantándose.
Easton rodó los ojos y se les
acerco con el ceño fruncido.
-Ustedes tres…-Los señalo
primero a ellos y luego me miro a mí.-Son unos hipócritas.
-East, ya vámonos antes de que
Ian venga.-Lo tomé por el hombro y el lanzó mi mano.
-Cállate.-Me ordeno.-Tu.-Señalo
a Jo.-Y tu…-Me señalo a mí-Tuvieron sexo en Nueva York de alguna manera, y
tu…-Señalo ahora Reed.-Apostaste conmigo que ibas a tener sexo con la bastarda…
-¿QUE USTEDES QUE?-Grito
furioso Reed mirando enojado a Josephine quien primero lo vio algo asustada
pero luego frunció el ceño.
-¿Apostaste con Easton que te
acostarías conmigo? ¡Eres un imbécil, Reed!-Lo empujo para hacerlo a un lado y
se empezó a ir.
-Ven acá-La siguió y la tomo
del brazo.
-¡Suéltame, Reed! –Le ordeno.
-¿Te acostaste con Henry?-Ladró.
-Ya Reed, déjala en paz.-Lo
tomé del hombro.
-¿Y cuándo planeabas
decirme?-La soltó y se giró hacía mí.
-Es un mal entendido, ya
cálmate, te explicamos.-Le dije.
-Yo no tengo que darle ninguna
explicación.-Corrió dentro de la casa.
-No puedo creerlo, Henry-Gruñó
nuevamente Reed.
-Ya te dije que lo voy a
explicar.
-Vete a la mierda.-Se metió a
la casa pero por la otra puerta.
Para colmo de todo, Easton
estaba tirado en uno de los camastros de playa dormido como bebé, maldita sea,
en otra ocasión lo hubiera llevado a su cuarto, pero se merecía que mi padre lo
regañara, así que lo dejé ahí y me metí a dormir.
Aaaahhhh continua pronto! Me encantó el capitulo!
ResponderBorrarAy, Dios!!! No quiero imaginarme el próximo capítulo! Cómo lo va a dejar solo al lado de la pileta encima alcoholizado ..... Espero que no le pase nada malo a Easton!
ResponderBorrarMuuuy buen capítulo!
Ay Easton!!!!
ResponderBorrarQuiero que llegue Catherine :) jaja
ResponderBorrarEste fue comentario mio ��
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