Luego de unos veinte minutos
donde Ian Archer me mostraba la parte de abajo de su casa, por fin sus dos
hijos se dignaron a bajar
, el primero tenía cabello castaño casi rubio, ojos
verdes como los de Ian, tez clara aunque tenía un leve bronceado debido a que
vivían en la playa, media a lo mejor un metro setenta, me hubiera parecido
guapo si su cara no fuera tan de pocos amigos, pero mi madre me había advertido
que los hijos de Ian eran muy mal educados, ya que cuando ella visito a su
amigo de la infancia dijo que ni siquiera la habían volteado a ver cuándo se
las presento y poco les falto para decirle que era una mujer de la vida
galante, ¿Qué pasaba con ese par?
-Chicos, ella es
Josephine-Menciono Ian paciente-Jo, ellos son Easton-Señalo al de ojos verdes-Y
él es Reed…- Vaya que Reed era muy guapo, tenía cabello negro, ojos azules pero
muy oscuros, y a diferencia de Easton e Ian tenía la piel muy blanca, suponía
que se parecía a su mamá.
-¿Qué onda?-Soltó primero
Easton.
-Hola-Conteste seria.
Ian, Easton y yo esperamos a
ver si Reed decía algo pero al contrario solo sonrío con suficiencia, dio media
vuelta, y fue escaleras arriba, seguido por Easton, Ian suspiro cansado.
-No te preocupes.-Lo
tranquilice.-No me lo tomó personal.
-Supongo que de alguna manera
los entiendes.
-¿Por qué dices eso?-Pregunte
muy confundida.
-Por tu padre.
-Ah…-No tenía ningún
sentido.-No… si la situación fuera al revés, yo los recibiría con mucho
gusto…pero supongo que sus razones tendrán-Dije incomoda.
Cuando por fin Ian termino de
mostrarme la casa, llegamos a la última puerta del corredor de arriba, ese
sería mi cuarto, entramos tenía una cama kingsize en medio de la habitación, la
adornaban una colcha color blanca con cojines blancos y azules, un closet
enorme, tocador, un escritorio, un librero, y buros a juego de la base de la
cama al fondo había una puerta era la del baño, que era muy espacioso, tenía
una tina espectacular, y un gran espejo.
-Espero te guste, la puse muy
neutra porque no sabía cómo que te gustaría-Menciono Ian.
-No te preocupes, esta
perfecta.-Respondí dejando mi bolsa sobre el tocador.
-Qué bueno que te guste, pero
bueno tengo que terminar unos pendientes en mi despacho, te dejo que te
instales, si necesitas algo sabes dónde está mi despacho, estás en tu casa, Jo.
-Gracias Ian.
La verdad es que los hijos de
Ian no me preocupaban ni un poco, solo eran dos niños malcriados y consentidos,
solo los tenía que evitar todo el tiempo posible, podíamos fingir que no nos
conocíamos cuando entráramos en la escuela, y no tenía interés de salir por el
verano, con unos cuantos libros, la playa y yo, la pasaríamos muy bien,
necesitaba olvidarme de los problemas de Nueva York un tiempo antes
de que pasara lo que tuviera que pasar.
Los primeros días pasaron
bastante tranquilos, prácticamente había estado de mi cuarto, a la playa, y
devuelta a mi cuarto, al parecer las únicas comidas familiares “obligatorias”
eran las cenas, aunque Easton y Reed se saltaban algunas, a veces uno, luego el
otro, y el día anterior solo habíamos sido Ian y yo a la hora de la cena,
aunque para nada me molestaba, los chicos usualmente me ignoraban y ya, a veces
hacían comentarios fuera de lugar pero Ian y yo solo los dejábamos pasar como
si no nos hubiéramos enterado.
Eran las seis de la tarde le
estaba ayudando a Ian a poner la mesa para que cenáramos-el servicio siempre se
iba a las cinco, a excepción del chofer de Ian.- nos dejaban la cena lista para
servir, así que Ian se encargaba de ello, y yo siempre le ayudaba, el tipo era
buena onda, no entendía a sus hijos que vivían en constante inconformidad.
-¡Reed, Easton! Bajen a cenar
ya.-Les grito al pie de las escaleras.- ¿Ya tienes hambre?-Me miro.
-No mucha, ¿y tú?-Pregunté
sentándome en mi lugar recurrente.
-Sí, no pude comer nada en el
día tenía un par de juntas que se alargaron de la manera más tonta posible.
Cuando por fin bajaron no parecían
con la idea de sentarse los dos parecían listos para salir, aunque no se podía
esperar otra cosa era sábado en la noche.
-Yo no voy a cenar.-Anuncio
Easton, que se veía de lo más guapo con sus jeans ajustados y una camiseta de
manga corta azul marino con letras blancas.-Tengo que irme ya.
-¿A dónde?-Pregunto Ian con
cara de pocos amigos.
-A una fiesta.-Repuso este.
-Yo también así que cenas bien,
no te acuestes tarde.-Le sonrío Reed a su padre, el también lucía muy guapo
prácticamente tenía pues lo mismo que Easton pero él traía jeans negros y una
camiseta verde oscuro con letras negras.
-Primero van a cenar.-Afirmo su
papá sentándose.
-Ay no, paso.-Dijo Easton-Aún
me duelen mucho los dientes-Easton había ido al dentista esa tarde porque tenía
brackets y por experiencia propia sabía que cuando los ajustaban dolía un
montón.
-No te duelen para ir a tu
fiesta-Respondió Ian.
-No tiene nada que ver una cosa
con otra-Rodó los ojos.
-No me importa, se sientan los
dos a cenar o no salen-Declaró Ian.
Reed y Easton se vieron
bastante enfadados y pero se sentaron a comer, Easton medio estaba comiendo y
Reed en el celular cuando Ian dijo:
-Deberían llevar a Jo a la
fiesta.-Los tres casi escupimos-No me vean así, llevas toda la semana
prácticamente encerrada aquí, salir te hará bien, conocer personas y eso.
-No, Ian, no creo que sea una
buena idea. –Conteste enseguida.
-Tengo que darle la
razón.-Soltó Easton divertido- Aparte ya la viste-Me miro- No está lista para
una fiesta.
-Easton.-Le regaño Ian. No era
una mentira traía unos shorts de deporte y una camiseta, había salido a correr
antes de la cena.
-Se puede cambiar, y listo.
-Nosotros ya nos íbamos.-Soltó
Reed con muy mala cara.
-Pues la esperan Reed, y si no,
no van.-Al parecer Ian podía ser firme en los peores casos.
-No, Ian, yo paso en
verdad.-Dije yo.
-No, Jo, te hará muy bien
convivir con este par y aparte con más gente, vamos inténtalo ¿Si?-Ian me miro
bastante ilusionado.
-Bueno…-Me rendí.
Reed me fulmino con la mirada
como si no viera que prácticamente Ian me había obligado a aceptar.
Cuando termine de cenar subí a
bañarme rápidamente no necesitaba más odio de los hermanos Archer, me puse unos
shorts de mezclilla la cintura y una blusa blanca corta de tirantes
que llegaba arriba de los shorts, me puse unos tenis de meter blancos, me seque
un poco el cabello para que se acomodara, me puse mascara para pestañas, y baje
por fin.
-Bueno.-Se levantó de la mesa
Easton donde los tres me esperaban.-Los veo allá, yo pasare por Taylor a su
casa, y no creo que Josephine quiera hacer mal tercio, así que nos vemos por
allá, hermano-Le sonrío burlón a Reed.
Reed le enseñó el dedo medio,
aunque a Easton solo le dio mucha risa y salió de ahí, el más grande me volteo
a ver con cara de pocos amigos:
-Pues vámonos.
-Ian, yo creo que es mejor que
no vaya, no conozco a nadie…-Intente una vez más.
-Es mejor.-Reed se encogió de
hombros.
-Pues espero que tengas las
mismas ganas de quedarte porque si Jo se queda tú también.-Dijo Ian
levantándose.-Se ponen de acuerdo.-Camino hacia su despacho.
¿Por qué me pasaba esto a mí?-
Reed me miro enojado.
-¿Qué?-Conteste enojada.- ¿Cuál
es tu problema?
-Tú, básicamente.
-Mira yo no quería ir a la
estúpida fiesta, y no quiero, solo intentaba no tener que aguantarte toda la
noche en un lugar lleno de personas que no conozco. Es más evito la pena, que
te diviertas Reed.
-Ah no, no, tú no me vas a
arruinar los planes, así que súbete al maldito auto y vámonos ya, porque no
pienso quedarme aquí.
-Tú no me dices que hacer, y no
planeo ir a ninguna fiesta, menos contigo.
Reed puso los ojos en banco
bastante enojado, y suspiro:
-Ya, bien lo lamento ¿De
acuerdo? Vamos, nos la pasaremos bien-Me le quede viendo raro-¿Qué? Hablo
enserio.
-¿Qué estas tramando?-Pregunte
desconfiada hace un segundo se había portado como un idiota
-Nada, solo quiero ir a la
fiesta y pasar un buen rato ¿de acuerdo?
-Bien.-Le di el beneficio de la
duda.-Pero regresamos temprano.
-Bueno.-Se encogió de hombros.
No sabía porque había aceptado,
aunque debía admitir que Reed tenía un cierto encanto y más cuando no tenía
cara enojada todo el rato, pero otra parte de mi esperaba no arrepentirme de mi
decisión
Reed condujo una media hora y
luego se detuvo en una mansión abarrotada de adolescentes ebrios, me abrió la
puerta para mi sorpresa y baje del auto, caminamos adentro de la casa, Reed
saludaba a medio mundo, algunos me saludaban a mí y otros solo ignoraban mi
presencia, llegamos a una mesa donde había todo tipo de bebidas, Reed tomo un
vaso rojo de la mesa y se sirvió cerveza de un pequeño barril que estaba ahí.
-¿Quieres? -Me
ofreció el vaso.
-¿Por qué no?-Me encogí de
hombros y le acepté el vaso, él tomo otro vaso y se sirvió
-Ahorita vengo, no tardo.-Me
sonrió, estaba tan guapo sonriendo
Me quedé en la mesa dándole
pequeños sorbos a la cerveza que tenía en las manos, Reed ya había tardado y
comenzaba a aburrirme.
-¿Eres a nueva novia de
Reed?-Una chica de cabello quebradizo pelirrojo se me acerco.
-No, para nada-Me reí-Soy Jo…
¿Tu?
-Soy Danielle.-Me sonrió -¿Eres
de por aquí?
-No… acabo de llegar hace unos
días, ¿eres algo de Reed? ¿Su novia, ex o algo así?
-No, solo tenía curiosidad,
conozco a Reed de la escuela, perdón por acercarme así jaja
-No te preocupes, es que no
quiero problemas-Respondí
-Ya. ¿Por qué vienes con él?-Se
rio –perdón no tienes que contestar.
-Porque su padre pensó que era
buena idea que viniera a la fiesta-Dije incomoda.-Es difícil de explicar
-De acuerdo, no más preguntas,
¿vendrás a nuestra escuela?-Asentí- Te va a encantar, aunque todavía falta un
montón, te presentare a mis amigos, es súper de flojera que estés aquí sola.
Acepte sin dudarlo necesitaba
amigos, no podía pasar el verano y mi último año de preparatoria encerrada en
mi habitación leyendo y haciendo tarea, Danielle me presento a sus tres amigos,
Michelle, Diane, y Daniel, este el último era su hermano, también era
pelirrojo, tenía ojos verdes, alto, tez clara, una sonrisa increíble, estaba
guapísimo.
Me la estaba pasando increíble
la verdad, pero no había vuelto a ver a Reed, y menos a Easton, no tenía sus
números así que tampoco podía contactarlos, empezaba a hacerse tarde.
-Ahorita vengo, iré a buscar a
Reed, no tardo.-Avise a los muchachos y fui en busca de Reed.
Cuando por fin encontré a Reed
estaba peleándose a golpees con otro chico, al principio pensé que era una riña
pero luego el círculo se publicó que los rodeaba estaba animándolos, al parecer
lo estaban haciendo por diversión, ¿Qué estupidez era esa? Busque a Easton con
la mirada, no tenía ganas de irme pero me ponía de nervios estar ahí sin saber
cómo iba a regresar a casa de Ian, al fin y al cabo había llegado con Rees y no
tenía ni idea de cómo volver.
-No pongas esa cara,
apostaron-Me dijo alguien tocándome el hombro.
-Easton-Solté al verlo.- ¿Está
loco?
-Nah... Solo es para sacar ya
sabes estrés y eso...-Easton olía, no, APESTABA terriblemente a alcohol.
-Es una tontería-Solté enojada,
¿golpearse para sacar estrés? Vaya tontería, me quedé viendo un segundo hasta
que vi como Reed le daba un golpe directamente en la nariz y mejor voltee hacia
otro lado y es que no podía ver como los hombres se comportaban como animales.
Me quedé ahí evitando ver la
estúpida pelea entre Reed y el otro tipo, quería irme a casa pero no me iba a
subir con Easton estaba muy borracho, me estaba arrepintiendo de venir a la
fiesta, ¿Es que estos dos no tenían limites de ningún tipo o qué?
Cuando por fin se detuvieron
tome a Reed de brazo y lo jale hacía mí:
-¿Qué rayos te pasa?-Fruncí el
ceño
-¿De qué hablas? –Se limpio la
sangre de la boca con el antebrazo.-Solo era un juego
-¿Un juego? Estás loco-Rodé los
ojos.
-Ya relájate-Se rio- ¿Qué
quieres?
-Irme, es tardísimo-Me quejé.
-Que te lleve East-Soltó-Yo no
quiero irme aún, la noche es joven.
-No, Reed, él está muy
borracho, aparte vine contigo tu me llevas.-Ordené y es que no iba a irme con
Easton, Reed también olía a alcohol pero no como su hermano menor.
-¿O sino qué?-Alzo una ceja.-
¿Me acusaras? Primero tendrías que saber cómo regresar.
Lo fulmine con la mirada, era
un idiota, ¿Cómo se suponía que iba a regresar? Los ojos me picaban, la vida no
estaba siendo justa conmigo, y es que estaba en una ciudad que no era la mía y
en quien sabe en donde.
-Eres un idiota.
-Y tu una arrimada.-Le iba a
dar una bofetada, y es que estaba harta ¿Quién se creía para llamarme así? Pero
Reed me agarro de la muñeca y me apretó. –Ni se te ocurra.
-Suéltame, Reed-Me jale-Ya
déjame tranquila.
-¿No qué muy valiente?-Me
apretó aun más.
-Me estas lastimando.-Me quejé.
-¿No escuchaste que la
dejes?-Daniel apareció atrás de nosotros, Reed me aventó la mano.
-¿Tu
qué, Wright?-Se burló Daniel.- ¿No te han dicho que no te metas en lo que no te importa?
- Solo déjala en paz.-Me tomo
por los hombros.-Ven, Jo, te llevo a casa.
Fulmine a Reed con la mirada y
me fui con Daniel, lo peor es que me había quedado en las mismas, ¿Cómo iba a
volver a la casa Archer?
-Daniel, gracias… pero igual
tengo que regresar con ellos, no sé como volver…-Dije con la voz entre cortada.
-No te preocupes, somos
prácticamente vecinos vivo unas calles abajo, no tienes por qué estar esperando
a ese par, tranquila.
-Gracias…
Estaba incomoda al fin de
cuentas Daniel era un desconocido pero a pesar de todo me daba confianza así
que acepte y nos subimos a su deportivo esperando que de verdad sus intenciones
fueran buenas, pero así fue, en el camino me conto que el también iba a la
misma que escuela que Reed y Easton, lo cual me llenaba de alegría llegaría a
la escuela conociendo a varias personas, era todo un alivio, me sentí tranquila
cuando por fin se estaciono frente a la mansión Archer.
-Daniel, muchas gracias…-Le
sonreí-Por defenderme de Reed y por traerme, no tenias porque.
-Claro que sí, Reed es un
imbécil y no tiene porque portarse así contigo, sea por lo que sea.-Me sonrió.
-Gracias, descansa…-Antes de
bajarme del carro, salió de la puerta principal Ian.
-Buenas noches chicos…-Más bien
era de madrugada.-Jo, ¿Y Reed? Buenas noches Daniel.
-Reed…-Comencé, no sabía qué
hacer-Bueno él…
-Señor Archer, perdón que se lo
diga pero Reed es un idiota, Jo se quería regresar y él la ignoro y le falto al
respeto, a lo mejor no me incumbe pero no debería dejar a Jo al cuidado de sus
hijos si no pueden cuidarse ni ellos mismos.
Ian y yo nos quedamos atónitos,
pero a pesar de todo quería defender a Reed pero no se podía defender lo
indefendible y sé que Ian estaba totalmente de acuerdo conmigo porque solo
dijo:
-De acuerdo, Daniel, gracias
por traer a Jo, salúdame a tus padres.
-De su parte, señor Archer.
Bueno el chico no tuvo que comportarse así pero creo que jo no va adelantar nada con eso al revés en un cierto modo la vi egoísta no pudo pedirlo amablemente decir que cuando iba a volver no gira todo al rededor de ella al fin y al cabo es ella la que invadió sus vidas y el papá también es un egoísta fue el quién se comprometió en tener la chica en casa no sus hijos jajajaja también quiero saber sus edades
ResponderBorrarSiguela pronto me enganche en la historia
Terry
Uhm...No sé, algo se trae Jo y no sé que es... Me parece que es como muy bien portada para ser verdad. Será que saca las uñas más adelante? Y creo que los chicos están en un buen lio y no por culpa de Jo. Quiero que continúe porfa ;)
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