Cuando me baje del taxi hice que me dejara justo en la entrada para que Ian no me viera llegar
, no quería que Reed tuviera problemas, sabía que ya tenía suficientes y a lo mejor no es como que no se los mereciera pero si había pasado un gran rato con él, y no quería arruinarlo, que tonta ¿no? Reed se portaba como un idiota y la que se sentía mal por él era yo.
No pasó mucho tiempo antes de que se estaciono justo frente a mí se veía de mal humor aunque ese era su estado natural casi siempre, se bajó de pronto.
-¿Por qué te fuiste así?-Me gruño cuando estaba frente a mí.
-¿Y tú?
-No me voltees la pregunta, Josephine.
-Me fui así porque me dejaste ahí botada.-Conteste enojada.
-Porque estabas con el idiota de Wright-Dijo subiendo el tono.
-¿Y qué? Él fue el que se acercó, y en todo caso ¿Qué tiene? Si estamos juntos nadie se me puede acercar o ¿Cómo?
Reed pareció debatirse el mismo antes de decir:
-Ya me porte como un idiota, ¿bien? Pero es que ese tipo no me agrada nada.-Soltó.
-¿Por?
-Porque no
-Bien. Pero yo no tengo la culpa, ni siquiera sabía que estaba ahí Reed…-Me excuse como idiota, ¿por qué tenía que hacerme sentir culpable a mí?-Y soy libre de hablar con quién yo quiera.
-Ya sé… pero es que…
-¿Estas celoso?-Le sonreí, ya no quería pelear.
-¿Celoso, yo? ¿De ese idiota?-Alzó una ceja.-Por favor…
-Bueno… ¿te puedes calmar ya?-Le pedí.
-Estoy calmado.-Y era cierto su cuerpo ya se estaba relajando.-Lo lamento, ¿bien?
-Yo también lo lamento, ¿bien?-Me sonrió-Vamos antes de que tu papá diga que ya nos tardamos.
-¿No me vas a acusar esta vez?-Me dedico una mirada socarrona.
-Yo jamás te acuse.-Afirme.
-¿Entonces…? ¿Quién le dijo lo de la fiesta, eh?-Me interrogo, no le diría que había sido Daniel porque no quería que se pusiera furioso.
-Deja el pasado en el pasado.-Le tomé la mano.-Vamos…-Lo jale.
-Vamos.-Me sonrío viendo mi mano.
-Ay ya vamos…-Lo solté y camine hacia la mansión Archer.
Entramos a la mansión que al parecer estaba sola, así que Reed me dijo que viéramos una película en la sala, a lo cual no me pude resistir, me gustaba no estar sola, y la compañía de Reed era buena.
-¿Tienes novio?-Me pregunto Reed a mitad de la película que seguro lo tenía tan aburrido como a mí.
-¿Por qué?-Me gire hacía él, estábamos sentados cada quien en una orilla de uno de los sofás blancos de la sala, me acomodé para verlo de frente y él me imito.
-Nada más.-Se encogió de hombros.
-No tengo, sería tonto tener novio si pasare un año en California, ¿no crees?
-Si sería, pero hay personas que creen en las relaciones a distancia.
-¿Tu por ejemplo?
-Por supuesto que no, jamás he tenido una novia, si he salido con chicas y eso… pero no mucho tiempo.
-Wow, todo un rompecorazones –Me burlé
-Algo así…-Bromeo.-No te vayas a poner celosa, eh.
-Ay, si claro.-Rodé los ojos.
-¿Y tú?
-¿Yo qué?-Pregunté confundida.
-¿Tienes muchos ex novios?-
-Dos, pero no tiene importancia.-me encogí de hombros.
Reed siguió interrogándome sin mucho, no era de esas personas que soltaba la información de una, no me gustaba hablar de mi pasado, y de las cosas que algún día me habían hecho daño, y menos con una persona con la cual no sabía si podía confiar o no.
Una hora después aproximadamente Henry, Easton e Ian llegaron a casa con algunas bolsas, al parecer habían hecho el súper, nos saludaron.
-Hermano, Tay me invito a jugar un partido como en los viejos tiempos ya sabes todos, y a una pequeña reunión en casa de Richard.-Anuncio Henry entrando en la sala.-Vamos.
-Suena bien, Henry pero dudo mucho que Ian me deje salir.-Se quejó.
-Nos deje salir.-Dijo Easton entrando.-Esta de pesado… -Se tiró en el sillón individual que estaba al otro lado del sillón.
-Ni que lo digas…-Puso los ojos en blanco el mayor de los Archer.-Pero a lo mejor lo convencemos, ¿No, Josephine?-Me sonrió-¿Por qué vas a venir con nosotros, no?
-¿Ah, sí?-Preguntamos Easton y yo al mismo tiempo.
-Pues sí-Afirmo Henry.-Nos divertiremos.
-No creo que sea una buena idea…-Comencé.
-¿Por? ¿Por qué iras a la fiesta de Wright?-Me cuestiono Reed.
-No…-¿Por qué otra vez se estaba enojando?-Pero yo… Ni siquiera tienen permiso.
-Ustedes déjenmelo a mí.-Nos sonrío Henry.
Yo no estaba segura de si al final se suponía que iría con ellos o no, pero habían mencionado un partido ¿partido de qué? No quería ir a una fiesta con los Archer, no otra vez, ellos se meterían en mil líos y yo ¿Cómo volvería a la mansión?
De todas maneras cuando termine de ayudarle con la cena a Ian, quien me había estado interrogando sobre todo mi día con Reed, quien nos ayudó a poner la mesa y se había cambiado, igual que los otros dos hermanos quienes estaban en pants y una camiseta, estaban muy confiados de que Ian los iba a dejar porque los tres estaban listo para jugar lo que fueran a jugar.
Los cinco comenzamos a comer en silencio, y es que todos estábamos disfrutando del pollo que habíamos cocinado Ian y yo, estaba nerviosa, no quería ver otra escena donde Ian estuviera muy enojado, porque usualmente siempre estaba tan tranquilo, que me asustaba pensar que fuera decirle algo a sus hijos.
-Oye, Pa…-Empezó Henry.- ¿Recuerdas a Taylor?
-Si.-Contesto Ian.- ¿Cómo le va?
-Bien, está estudiando en Alemania, ya sabes… medicina, pero ahorita está en la ciudad, y entonces…
-¿Entonces?-Lo miro Ian.
-Pues nos invitó a jugar, ya sabes por los viejos tiempos, y con los chicos de aquí y eso.
-Están castigados, Henry.-Dijo Ian sin rodeos.
-Pues sí, pero estaré yo con los chicos, solo será un partido y a lo mejor comer algo.
-Tú también estás castigado.
-¿Por?-Pregunto de lo más sorprendido.- ¿No fue suficiente castigo traerme a California?-Ian lo fulminó con la mirada- Ya perdón, eso no fue un castigo, pero papá es verano, y Taylor vive en Alemania, quien sabe cuándo se podrá dar de nuevo la ocasión, anda…
Ian parecía contrariado y no dijo nada por bastante tiempo y al final soltó:
-Bien. Pueden ir, pero no quiero problemas, y pobre de ustedes si prueban gota de alcohol.-Les advirtió.- O alguna otra cosa.
-Eres el mejor, papá-Dijo Easton.- ¿Puede Henry llevarse mi auto? Porque no planeo irme con Reed y ella.
-¿Vas a ir con ellos?-Me preguntó Ian, no sabía si estaba confundido o entusiasmado.
-Yo…-Henry y Reed me miraron fijamente.-Si… supongo que será divertido.
-Se portan bien.-Les dijo a sus hijos.
-Como siempre papá.-Agregó Reed.-Y Jo estará bien, lo prometo.
Terminamos de cenar, le dije a Reed que me iba a cambiar, a lo mejor se iban sin mí o algo así, me cambie mis jeans sueltos por unos ajustados negros, los doble un poco de abajo, y me puse una sudadera amarilla mostaza con letras azules que decía “CALIFORNIA, LA” me puse los mismo tenis blancos que traía y me cepille un poco el cabello, cuando estaba terminando alguien tocó a mi puerta para mi sorpresa no era Reed o Ian sino Henry.
-Hola…-Dije confundida.
-Necesitamos hablar.-Soltó entrando a mi cuarto.
-¿Hablar?-Pregunté muy confundida.
-¿Puedes cerrar la puerta?-Me pidió y eso me asustaba un poco.
-¿Por…?
-Solo ciérrala, no te haré nada.-Rodó los ojos.
-Bien.-Obedecí.
-Te veías mejor de pelirroja…-Soltó de pronto.
-¿Perdón?
-Deja de fingir, ya sé que Josephine no es tu nombre-Me acusó.
-A ver, ¿qué? ¿De qué estás hablando?-Fruncí el ceño.-No sé qué pienses o que teorías tienes, pero claro que me llamo Josephine, y no sé de donde diablos piensas que me conoces, pero estás muy, muy confundido, Henry.
-Mira no le diré nada Reed, solo quiero la verdad.
-¿Qué verdad?-Pregunté de mal humor.- ¿Estás loco, o algo así?
-Hace dos años en Nueva York.-Me miró como si eso me tuviera que decir algo.
-Deberías salirte de mi cuarto ya.-Le pedí.
-Catherine, solo di la verdad.- ¿Catherine?
-¿Catherine?
Cuarto de la intrusa (Henry)
El asunto de que la intrusa fuera la chica de Nueva York me había dado vueltas todo el día, porque era ella, estaba noventa y nueve por ciento, vamos que si estaba borracho y drogado pero jamás podría olvidar su cara.
Así que me decidí por hacerle frente sin que nadie de mi familia supiera, no planeaba intentar nada, solo quería explicaciones, respuestas, esa chica me traía pensando en ella desde hace dos años, y ahora la tenía enfrente y estaba negando lo que había pasado, vamos que no era como que yo me enorgulleciera de lo ocurrido, pero solo estábamos nosotros dos.
-¿Catherine?-Pregunto ella soltando una risa-¿De dónde conoces a Catherine?
-¿Por qué hablas de ti en tercera persona?-Esta chica era muy rara.
-No soy Catherine, amigo.-Soltó rodando los ojos.-Es mi hermana.
-Por favor…-Suspire.-No te creó nada.
-Pues no me creas, así que ya te saque de las dudas.-Me sonrió.-Puedes irte de mi cuarto.
Negué con la cabeza, ¿y si estaba diciendo la verdad? Si ella fuera hermana de esa chica, podría encontrarla ¿no?
-A ver, ya perdón ¿de acuerdo?-Me intente calmar.-No quería portarme como un idiota.
-Ustedes nunca quieren hacer las cosas pero siempre las hacen.-Me echo en cara.
-No, de verdad… es solo que…-No podía creer que le diría esto a la bastardita.-Llevó mucho tiempo buscando a tu hermana, y te vi y son iguales…
-No somos iguales, ella es pelirroja, y diferente.-Negó con la cabeza.
-Bien. ¿Puedes enseñarme una foto o algo así?
-¿Y luego me dejaras tranquila?-Pregunto
-Si.-Le sonreí.
Camino hacia la cama y tomó su celular, después de unos minutos, me estiro el celular.
-Puedes ver esa y a la derecha.-Me explico.
Asentí y miré el teléfono, en la primera foto eran ellas dos con sus padres, decía la verdad ahí estaba Catherine con sus caireles rojos, sus ojos verdes profundos y una gran sonrisa, si eran muy parecidas pero tenían algo que las hacía muy distintas, le di a la siguiente foto, en esta estaban las dos juntas, Catherine llevaba un toga y un birrete, y Josephine un vestido negro, las dos sonreían, vi unas cuantas más, y luego le regrese el celular.
-Perdón.-Fue lo único que atiene a decir.
-No importa.-Me aseguro-¿Es bonita, no?
-Bonita se queda demasiado corto…-Me quedé pensando en ella.- ¿Dónde está?
-Supongo que en la escuela…-Respondió- No quiso ir a casa en verano, tienen cosas en común.
-¿En dónde estudia?-Insistí.
-No te lo diré.-Contesto.-No sé si ella quiere saber de ti, ni siquiera sé porque la conoces, Henry.
-Ay por dios.-Suspire exasperado.-No es como que la vaya a ir a buscar.
-¿Seguro?
-Muy seguro…-Mentí
Pero en eso alguien tocó la puerta, era Reed, así que ella abrió sin pensarlo dos veces, y estaba bien, podría malinterpretarse si se tardaba mucho más, en cuanto abrió la puerta la cara de Reed cambio a confusión cuando me vio.
-Ah…-Comenzó –Te venía a preguntar si ya estabas lista.
-Sí, ya estoy –Respondió Josephine.
-¿Entonces no tienes las llaves de Easton, verdad?-Pregunté, Easton había dicho que ella había llevado su carro.
-No.-Respondió.-A lo mejor tu papá no busco bien.
-Seguro.-Respondí con un suspiro.-Adelántense, voy por las llaves.-Salí de ahí lo más pronto posible-
Muy bien! Me interesa mucho la historia de Henry y Catherine!
ResponderBorrarQué irá a hacer ahora Henry con esa información !!!!! ������ Jejejje
ResponderBorrarNo me gusta cuando a cada rato le andan pidiendo disculpas a Josefine. Todo la ofende parece. Encima que tengan que tolerarla un año!!
Yo tampoco comprendo porque ahora tiene que tener la aprobación de la chica ,Ian tiene que pensar que son sus hijos no tienen que estar lamiendo los pies a esa engreída y yo digo lo mismo se le va hacer largo ese año
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